Florentino Pérez presidirá la Superliga que pondrá en jaque al fútbol actual
Doce clubes fundadores, entre ellos, Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid, apuestan porque la nueva competición europea, con 20 equipos, se empiece a disputar el próximo agosto.
Llevaban años amenazando y ayer, a las 12:10 de la noche, todo el proyecto salió a la luz. La Superliga europea es una realidad que amenaza con poner en jaque a todo el mundo del fútbol tal y como lo conocemos. El comunicado de fundación de este superclub privado de las instituciones futbolísticas más poderosas del mundo que presidirá Florentino Pérez dice lo siguiente:
”Doce de los clubes de fútbol más importantes de Europa anuncian hoy que han llegado a un acuerdo para formar una nueva competición, la Superliga, gobernada por sus Clubes Fundadores. El AC Milan, el Arsenal FC, el Atlético de Madrid, el Chelsea FC, el FC Barcelona, el FC Internazionale Milano, la Juventus FC, el Liverpool FC, el Manchester City, el Manchester United, el Real Madrid CF y el Tottenham Hotspur se han unido como Clubes Fundadores. Se invitará a otros tres clubes para que puedan unirse antes de la temporada inaugural que empezará lo antes posible. De cara al futuro, los Clubes Fundadores esperan mantener conversaciones con la UEFA y la FIFA buscando las mejores soluciones para la Superliga y para el conjunto del fútbol mundial. La creación de la nueva Liga se produce cuando la pandemia mundial ha acelerado la inestabilidad del actual modelo económico del fútbol europeo".
Este último punto, la actual crisis económica motivada por la pandemia mundial de coronavirus, ha sido la clave para que se pueda poner en marcha la Superliga europea, cuyos clubes organizadores quieren poner en marcha, incluso, este próximo mes de agosto.
Según el comunicado, la Superliga la disputarán 20 clubes, por lo que habrá cinco que se podrán clasificar temporada tras temporada. “Participarán 20 clubes, los 15 Clubes Fundadores y otros cinco equipos adicionales que se clasificarán anualmente sobre la base del rendimiento de la temporada anterior. Todos los partidos se jugarán entre semana, todos los clubes seguirán compitiendo en sus respectivas ligas nacionales, preservando así el calendario tradicional que está en el centro de la vida de los clubes".
"La temporada comenzará en agosto con la participación de los clubes en dos grupos de diez, que jugarán partidos de ida y vuelta; los tres primeros de cada grupo se clasificarán automáticamente para los cuartos de final. Los equipos que terminen en cuarta y quinta posición jugarán un playoff adicional a doble partido. Posteriormente se jugarán playoffs de doble partido a partir de cuartos para llegar a la final, que se disputará a partido único, a finales de mayo”.
El presidente del Real Madrid y de la Superliga, Florentino Pérez, aseguró que con este proyecto "vamos a ayudar al fútbol a todos los niveles a ocupar el lugar que le corresponde en el mundo. El fútbol es el único deporte global en el mundo con más de 4.000 millones de seguidores y nuestra responsabilidad como grandes clubes es responder a los deseos de los aficionados".
Destacan las ausencias, al menos en el origen, de clubes como el PSG o el Bayern de Munich que, indudablemente, serán invitados a formar parte del grupo en próximas fechas. Nada más conocer el comunicado fundacional de la Superliga, llegaron los manifiestos en contra, tanto de la UEFA, como de las ligas profesionales, e incluso se pronunciaron Macron y Johnson, los presidentes de Francia y Reino Unido, respectivamente. Por su parte, la FIFA, que está del lado de los clubes fundadores de la Superliga, se arrogó el papel de teórico mediador entre la UEFA y esos clubes.
Amenaza contra los jugadores
La UEFA llegó a amenazar con sancionar a los futbolistas que participaran en la futura Superliga con dejarles sin participar en las competiciones internacionales que disputen sus selecciones. La nueva competición podría suponer el final de las Ligas como las conocemos hasta la fecha, aunque una referencia podría ser la Euroliga de baloncesto, que en las últimas temporadas ha logrado un equilibrio más o menos consistente con las Ligas nacionales.