Mario Mola, mejor español con su décimo puesto en triatlón
La delegación española nunca tuvo opciones reales de medalla en una prueba que fue muy rápida desde el principio. El noruego Blummenfelt, campeón olímpico
Mario Mola
No ha podido ser. España se ha quedado sin medallas en la prueba de triatlón masculina de Tokyo 2020. Mario Mola, Fernando Alarza y Javier Gómez Noya no pudieron saborear las mieles del éxito en una jornada marcada por la temperatura del agua y la elevada humedad que acompañó a los deportistas durante toda la mañana oriental.
Es cierto que la empresa que tenía por delante la 'Triarmada' era muy complicada. El abanico de favoritos era muy amplio y los tres españoles no podían permitirse el más mínimo fallo, pero las esperanzas de conseguir una plaza en el podio estaban ahí debido a la calidad que atesoran.
Sin embargo, desde el primer segmento los españoles fueron siempre por detrás. La natación dejó a los españoles en el medio del pelotón (puestos 38, 40 y 41) y eso les obligó a exprimirse en los 40 kilómetros de bicicleta. Hubo que esperar a la quinta vuelta para que los tres conectaran con el grupo de cabeza. Durante las tres rondas siguientes intentaron recuperar energías para el tramo de carrera, pero volvieron a salir cortados de la segunda transición y la prueba se les puso muy cuesta arriba.
El británico Alex Yee apretó desde el principio y los triatletas iban descolgándose uno a uno del grupo cabecero. Por detrás, Mario Mola venía remontando rivales, pero cada paso por meta la distancia con los líderes era mayor. Aquí se desvanecieron todas las opciones de alcanzar una medalla.
Cuando comenzó la última vuelta, los metales ya tenían dueños: Yee, Blummenfelt y Wilde. Solo faltaba por conocer el orden en el que cruzarían la línea de meta. Jonathan Bronwlee no pudo seguir el ritmo del terceto y vio cómo se le escapaba la oportunidad de suceder en el palmarés de los Juegos Olímpicos a su hermano.
Blummenfelt hizo su apuesta desde lejos y la jugada le salió redonda. El neozelandés Wilde fue el primero en pagar el esfuerzo y el británico Yee, mejor dotado para la carrera a pie, no pudo seguir el empuje del noruego. La distancia se fue ampliando metro a metro y Kristian Blummenfelt, que no se lo creía, alzaba los brazos como nuevo campeón olímpico. Por detrás entraban el joven Yee y Hayden Wilde.
En cuanto a los españoles, Mario Mola logró ascender hasta la décima plaza, Fernando Alarza fue duodécimo y Javier Gómez Noya, en los que probablemente han sido sus últimos Juegos Olímpicos, entró en vigesimoquinta posición.