El mito del fútbol español que ayuda a sofocar el terrible incendio de Ávila
Iker Casillas, originario del municipio abulense de Navalacruz, está apoyando sobre el terreno en las labores del extinción de un fuego que ya ha devastado 12,000 hectáreas.
Vista general del incendio de Navalacruz.
Afortunadamente, parece que el pavoroso incendio que comenzó el pasado sábado en las inmediaciones de las localidades abulenses de Navalacruz y Cepeda de la Mora ya es historia. El consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez Quiñones, ha asegurado que el fuego ya no tiene llama en ninguna parte de sus 130 kilómetros de perímetro, aunque el incendio sigue contando con un nivel de peligrosidad 2, pero ya no hay riesgo para la población.
El incendio se originó a partir de las llamas de un coche averiado en una cuneta y, con el fuerte viento que sopló en la zona durante todo el fin de semana, las llamas avanzaron rápidamente. El fuego ha arrasado ya 12.000 hectáreas, por lo que la organización ecologista WWF lo ha catalogado como el cuarto más grave de la historia de España.
Además de todos los efectivos públicos que han participado desde el sábado en la extinción del pavoroso incendio, numerosos habitantes de las dos poblaciones más cercanas al suceso, Cepeda de la Mora y Navalacruz, no han escatimado esfuerzos en ayudar para acabar con las llamas. Uno de ellos, sin duda, el más popular de todos, es Iker Casillas, cuya familia es originaria del municipio de Navalacruz, donde el exportero suele pasar algunos de sus días de vacaciones.
"Orgulloso de mi gente", escribió ayer mismo Casillas en sus redes sociales junto a una imagen en la que se veía a los vecinos trabajando para detener el fuego. "Hoy ha tocado hacer cortafuegos para prevenir el avance del fuego. Queda menos, seguimos", publicó minutos más tarde el que fuera capitán del Real Madrid y de la selección española de fútbol.