Bottas vuela, Verstappen supera a Hamilton y Sainz se exhibe

Hay veces que tiras la moneda y sale exactamente lo que no quieras que salga. Eso le pasó a Mercedes, que apostó todo en la precarrera del GP de Turquía a la remontada de Hamilton, que salía undécimo, en su duelo mundialista con Verstappen. Pero ganó su compañero Bottas, con MadMax segundo, Checo quinto y Hamilton en la quinta posición, lo que permite al holandés recuperar el liderato del Mundial a seis pruebas del final.

Carlos Sainz protagonizó una gran carrera, recuperando del decimonono de la salida al octavo final pese a un error en la parada de Ferrari, mientras que Fernando Alonso, que partía quinto, tuvo una carrera para olvidar tras un toque en la primera curva.

Amaneció en Estambul como se esperaba, con algunas gotas pero sin previsión de lluvia para la carrera. Había que salir con intermedios, porque el asfalto estaba mojado, pero nadie se esperaba que la pista drenara tan mal: en ningún momento de las 58 vueltas se pudieron montar neumáticos de seco, salvo una vuelta de un Vettel que parecía patinar sobre hielo. En esas condiciones, la salida fue nefasta para Fernando Alonso: partía quinto, tuvo un toque con Gasly en la primera curva pasando al decimoséptimo y, en la segunda vuelta, otro con Mick Schumacher. Por la segunda acción le sancionaron con cinco segundos en el pitstop y su carrera finalizó allí.

Por delante, las posiciones se estabilizaron desde el comienzo, con Bottas sometiendo con superioridad aplastante a Verstappen y con Leclerc y Checo Pérez a continuación. Hamilton iniciaba la largada undécimo, pero se atascó en la octava posición y sólo con el devenir de las vueltas, y de las paradas ajenas, era capaz de ir remontando. Mientras, por detrás, Carlos Sainz comenzaba una furibunda remontada desde la decimonovena posición hasta instalarse octavo. Un error en la parada de su equipo, seis segundos extra, le retrasó dos posiciones más, que las recuperó a golpe de vuelta rápida tras vuelta rápida que sólo se la pudo birlar el abusón de Bottas muy al final.

Mientras, el miedo a que los neumáticos intermedios se desintegraran en una pista que no era ni demasiado mojada para estar tranquilo con ellos y ni mucho menos lo suficientemente seca para blandos o medios, provocó que la carrera fuera una procesión bastante insulta, que sólo salpimentaron Leclerc (cuya ambición le hizo soñar con ganar la carrera mientras meditaba no parar, aunque sus neumáticos le dijeron basta y cayó hasta el cuarto), Hamilton (de nuevo enfadadísimo con su equipo por no hacerle caso acerca de sus sensaciones sobre los neumáticos y la pista) y Ocon, quien fue el único que logró la proeza de terminar sin parar. Un puntito arañó el francés.

Y seis puntos son los que tiene ahora de ventaja Verstappen sobre Hamilton, cuando solo quedan seis carreras para terminar el campeonato. La próxima cita, el fin de semana del 22-23-24 de octubre, en el GP de Estados Unidos. Y queda mucha, mucha tela que cortar. Más aún si Mercedes decide seguir sin hacer caso a Hamilton.