Al Barcelona le sobran diez minutos en Granada

Luuk De Jong sigue de dulce y el Barcelona se aprovechó hasta que el Granada empató con el tiempo reglamentario cumplido. El equipo de Xavi Hernández ha empatado con el Granada en el Nuevo Los Cármenes (1-1) y ha perdido una gran oportunidad para, a falta de gran parte de la jornada, ser tercera en la Liga Santander.

Menos mal, para el Barcelona, que De Jong dijo que, de momento, no se quiere ir cedido al Cádiz, porque le solucionó el horroroso partido en Mallorca y seis días después ha estado a punto de hacer lo mismo en la ciudad de La Alhambra.

Xavi Hernández salió con Dani Alves en el lateral derecho y puso en el centro del campo a los que más le gustan; esto es, el veterano Sergio Busquets y los dos mejores chavales de su cantera, Gavi y Nico. También con Dembelé, que estuvo muy activo pero muy poco eficiente y, sobre todo, con Luuk De Jong como nueve puro para rematar los centros desde los extremos.

El partido del exjugador del Sevilla pudo ser aún mejor, pero el VAR le anuló un gol por fuera de juego milimétrico en el primer cuarto de hora después de un brillante cabezazo que batió a Maximiano. Es más, De Jong protagonizó un estupendo remate de espuela que salió lamiendo el travesaño del portero luso del Granada.

El equipo que entrena el exseleccionador Robert Moreno no dio muchas muestras de peligro en la primera parte, aunque sí que tuvo una muy buena ocasión, que Ter Stegen, que parece redivivo, desbarató con una magnífica parada.

Al poco de comenzar la segunda parte, Luuk De Jong repitió el mismo gol que le anularon en la primera parte, pero esta vez estaba en posición legal, con lo que el tanto subió al marcador. Después, Xavi Hernández quitó al neerlandés para dar minutos a su compatriota Memphis, que reaparecía después de un mes fuera y también tuvo que cambiar al canterano Eric García, que sufrió una lesión muscular.

Parecía tener bien encarrilado el partido el Barcelona, pero en los diez últimos minutos tuvo que sufrir, justo desde el instante en el que el árbitro González Fuertes expulsó a Gavi por doble amarilla después de dos entradas no demasiado duras.

El acoso nazarí era cada vez más importante y ni siquiera Dani Alvés, teóricamente lesionado, pudo impedir lo inevitable. Y eso llegó en el minuto 89, cuando Antonio Puertas empató el partido después de un saque de esquina lanzado por el Granada.

Se añadieron seis minutos y en ellos pudo ganar el Barcelona después de una buena ocasión de Piqué, pero también pudo perder tras un error grosero de Ter Stegen que el propio portero alemán se encargó de arreglar un segundo después.