El ex del Atleti que está en la cárcel por ir con una pistola a ver un partido
El joven uruguayo Nicolás Schiappacasse, que llegó al filial del cuadro rojiblanco en 2017, se encuentra en prisión tras ser apresado con un arma camino del clásico Peñarol-Nacional.
El uruguayo Nicolás Schiappacasse permanece en una cárcel de Montevideo desde finales del pasado mes de enero cuando la Policía charrúa le detuvo al incautarle una pistola cuando se aproximaba a presenciar en directo el clásico del país entre Peñarol y Nacional. "Era una entrega para la hinchada, para ingresar al estadio, pero no sabía a quién debía dársela", se escudó el joven jugador, solo tiene 23 años, cuando fue preguntado por las autoridades.
El futbolista tan solo ha mantenido contacto con su abogada, Karen Pintos, que ha contado la situación en la que se encuentra Schiappacasse. "Estuvo una semana en el centro de ingresos y ahí sólo pueden verle los abogados. No puede recibir visitas de familiares ni de amigos. Después le trasladaron a la cárcel de Florida y está cumpliendo la preventiva de 90 días (hasta el 26 de abril)... y, además, ha dado positivo por coronavirus", comentó Pintos al programa 100% Deporte, de Sport 890.
La letrada reconoció "Nicolás está muy deprimido, está muy mal. Está sumamente deprimido. Cuando salga del protocolo COVID y podamos verlo vamos a pedir asistencia médica por este tema".
La de Schiappacasse es una más de esas historias de jóvenes jugadores, proyectos de estrella, que, finalmente, se quedan en el camino por mil causas diferentes, desde la mala cabeza hasta el penoso asesoramiento de sus representantes, pasando por las malas compañías.
Nicolás es un viejo conocido del Atlético de Madrid. El club rojiblanco lo fichó con solo 16 años y llegó a jugar algún que otro partido amistoso de pretemporada a las órdenes del Cholo Simeone. En el filial colchonero disputó ocho encuentros y en el Rayo Majadahonda, en Segunda División, elevó esa cifra hasta los 13 compromisos. Todavía cedido por el Atlético de Madrid en el Famaliçao portugués, Shiappacasse tuvo una presencia absolutamente residual en la Liga portuguesa, lo mismo que en el Sassuolo italiano, al que llegó después de desvincularse definitivamente del Atlético de Madrid.
Su trayectoria, como queda indicado, ha sido pésima y el uruguayo no ha encontrado estabilidad en ninguno de los equipos por los que ha pasado. Y eso que el chaval apuntaba buenísimas maneras. Sin ir más lejos, Schiappachasse fue elegido el mejor jugador de su selección cuando Uruguay se proclamó campeón de Sudamérica sub'17 en 2017.
Ahora, entre rejas, espera un acuerdo con la Fiscalía o la celebración de un juicio cuya sentencia es, cualquier cosa, menos clara.