La situación de Griezmann en el Atleti enfrenta al club con Simeone
El técnico argentino quiere que se quede, mientras que en las oficinas del Metropolitano inquietan los 40 millones de euros que tendrán que pagarle al Barça tras la cesión del francés.
Antoine Griezmann calienta antes de un partido.
Antoine Griezmann quiere quedarse en el Atlético de Madrid. Simeone quiere que el francés se quede. ¿Dónde está el problema? En las oficinas del Metropolitano. La situación contractual de Griezmann es, a día de hoy, un auténtico rompecabezas para los directivos del club rojiblanco. El atacante francés todavía pertenece al Barcelona y el origen de las dudas sobre su continuidad en la capital de España provienen de ahí. Cuando la cesión de Griezmann finalice, debido a las cláusulas que se establecieron en su momento haciendo referencia a la ejecución de la compra del futbolista si se cumplían unos requisitos de minutos de juego disputados, el Atlético debería pagarle al Barça una cifra que marea a los contables del club colchonero. Estaríamos hablando de 40 millones de euros que descuadrarían, a día de hoy, las cuentas de la entidad que preside Enrique Cerezo.
Por eso, el Atleti se está pensando lo de prescindir de Griezmann antes de que se cierre este mercado veraniego, o incluso trasladando el asunto al próximo mercado de invierno, con el único fin de ahorrarse esos 40 "kilos" que tendría que pagarle al Barcelona. Esta situación incomoda a Simeone, puesto que el técnico argentino ya ha tratado de manifestar en varias ruedas de prensa que le gusta la plantilla que tiene y que espera que no se vaya nadie más. Una forma sutil de dirigirse a la directiva rojiblanca haciendo alusión al caso Griezmann. También hay que tener en cuenta la intención del jugador, un Griezmann que sólo piensa en rojiblanco. No tiene ninguna intención de salir del Atlético y sólo tiene en mente resarcirse del curso pasado con una gran temporada, incluido el Mundial de Qatar con la selección francesa.