El rodeo de Fernando Alonso
Carlos Sainz vio cómo su carrera terminaba en los primeros 300 metros tras ser embestido por Russel, mientras que Fernando Alonso realizó un monumental gran premio y acabó en séptima plaza.
El Circuito de las Américas (COTA, Circuit Of The Americas) es un estupendo trazado para las carreras de coches que la FIA y Liberty deciden, año tras año, programar casi al final del calendario, cuando ya casi nada hay por decidir. Es una pena, porque el rapidísimo trazado tejano depara siempre una competición estupenda. En este 2022, ganó Verstappen vivió en un día horrible para Carlos Sainz, el poleman destronado en la primera curva, pero se pudo ver una exhibición monumental de Fernando Alonso, pese a que terminó séptimo.
Lo de Austin fue una carrera memorable, de las que hacen afición: lucha en pista, lucha en boxes, multitud de batallas en pista, accidentes de videoteca… Lamentablemente el primero de ellos tuvo lugar en la primera curva y le costó la carrera a Carlos Sainz. El madrileño perdió el primer puesto en la arrancada porque el Red Bull de Verstappen salió catapultado, y nada más trazar el primer giro, el Mercedes de George Russell, coladísimo, le embistió en un lateral. Trompo y retirada. A Sainz junior parece haberle mirado un tuerto en este tramo de temporada, pero la semana que viene en México seguro que tendrá otra opción.
Sin Sainz en carrera, todo apuntaba a un paseo militar de Verstappen, pero todo lo contrario. En COTA nunca hay coches de seguridad, y esta vez hubo dos. El segundo, provocado por un escalofriante accidente en el que se vieron involucrados Fernando Alonso y su próximo compañero de equipo, Lance Stroll. Alonso estaba haciendo un carrerón y al intentar adelantar al Aston Martin, el canadiense se movió y el asturiano le embistió por detrás, recorriendo varios metros haciendo el caballito a 300 kilómetros por hora, un rodeo en toda regla en el Estado que es el rey en esta espectacular modalidad deportiva.
El Alpine de Fernando sobrevivió al impacto de milagro, y al siguiente contra las protecciones, y regresó a pista el último. Con el coche de los picapiedra, soltando trozos de cuando en cuando, el asturiano guio a su bólido hasta la séptima plaza en meta. Su compañero Ocon, el del suelo nuevo, no pudo puntuar pese a no tener ningún accidente durante la carrera. Magia asturiana.
Con tanto parón, mientras, la prueba se compactó. Ferrari degradaba mucho menos de lo que se pensaba y Leclerc de repente se metió en la lucha por el triunfo, junto con Hamilton. Un mal pitstop de Verstappen, que además tuvo un mal gesto con su equipo por la radio, hizo creer que tal vez Mercedes ganaría su primera prueba de la temporada. Pero Max es insaciable y en el tramo final de la carrera recuperó el liderato para ya no soltarlo, por delante de Lewis y Leclerc y conquistando el campeonato del mundo de constructores para el equipo Red Bull apenas 24 horas después de que su propietario, Dietrich Mateschitz, hubiera fallecido en Austria.