Toni Nadal se sentará mañana en el palco del adversario de su sobrino Rafa
El mallorquín tiene que ganar a Felix Auger-Aliassime, el joven canadiense al que actualmente entrena su tío Toni, para tener opciones de seguir adelante en las ATP Nitto Finals.
Toni Nadal, con su pupilo Auger-Aliassime, en una imagen de archivo.
Rafa Nadal se juega mañana su futuro en la ATP Nitto Finals, el Masters de toda la vida, que se celebra desde este pasado domingo en Turín. El mallorquín, que ya cayó en París en su primer partido, repitió derrota en el choque inaugural del torneo que pone fin a la temporada y que nunca, hasta el momento, ha podido ganar. Nadal cayó ayer ante el estadounidense Taylor Fritz por 7-6 y 6-1, en un encuentro con numerosos errores del mallorquín.
En el otro partido del grupo, Casper Rudd protagonizó una relativa sorpresa al imponerse al canadiense Felix Auger-Aliassime, uno de los jugadores que llega al final de la campaña en mejor forma. Por eso, el partido que mañana (14:00 horas) disputarán Nadal y el canadiense es definitivo para saber cuál de los dos se mantendrá con opciones de disputar las semifinales del antiguo Masters. La progresión de ambos jugadores hace algo favorito a Auger, aunque Nadal continúa conservando ese afán de competición que le ha hecho un deportista absolutamente único.
El dato más curioso del encuentro es que el entrenador del jugador norteamericano es Toni Nadal, técnico durante tantísimos años de su sobrino Rafa. Ya ocurrió en el pasado mes de junio, cuando Nadal venció a Auger-Aliassime en los cuartos de final de Roland Garros. En aquella ocasión, Toni Nadal no estuvo en el palco del canadiense, cumpliendo así el único requisito que le puso cuando acordó dirigir su carrera.
Sin embargo, mañana será distinto y Toni formará parte del equipo de Auger que estará presenciando en directo el partido en Turín. En declaraciones al diario Marca, Toni Nadal explicó el cambio de actitud respecto a lo ocurrido en Roland Garros. "No voy a decir quién quiero que gane, pero me sentaré en el banquillo de Aliassime. En Roland Garros era diferente porque también se enfrentaban por primera vez y en Roland Garros hay algo más. Lo que seguro que no voy a hacer es celebrar ningún punto. Puestos a estar que más da estar aquí que estar allí. Gane uno y otro no será ninguna tragedia", apuntó el que fuera entrenador de Rafa Nadal.