Las obras volverán a condicionar el mercado del Madrid: cantera y españoles

Nacho, Kroos, Modric, Ceballos, Asensio, Mariano y Benzema acaban contrato el próximo 30 de junio con el Real Madrid, y sólo la continuidad del último parece garantizada. Lunin, Odriozola, Mendy, Vallejo y Hazard están en la rampa de salida. Son doce jugadores sobre una plantilla de veintitrés. El Real Madrid ha ido aplazando por diversas circunstancias la renovación del plantel, pero este verano es ineludible. Y lo tendrá que hacer en un contexto nada boyante. A Florentino Pérez le toca hacer malabares con los números.

El próximo mercado de fichajes del Real Madrid estará de nuevo condicionado por las obras del estadio. Otra temporada, esta 22-23, con el Santiago Bernabéu a medio remodelar, con las ventas en taquillas comprometidas, sin ingresos por explotación de locales comerciales en el recinto, con la tienda oficial del club encajonada entre toros y cerchas, con los graves problemas estructurales con el césped que se están viendo ya con las obras y con un equipo que no emite las señales del pasado curso, las previsiones económicas de la entidad no son nada halagüeñas.

Algunos hablan ya de una elevada cifra de pérdidas (alrededor de 40 millones de euros, según VozPopuli) que podría ser paliada si Sixth Street, el private equity que ya trabaja con el club blanco para explotar el nuevo Bernabéu cuando acaben las obras, anticipa los pagos previstos contractualmente para tapar el agujero. Pero sea de una forma o de otra, la realidad es que el club blanco tendrá que apretarse el cinturón en el mercado de fichajes, porque es inviable salir a él.

Cuatro o cinco del Castilla

Así las cosas, la decisión del Real Madrid es cambiar su política de los últimos años para darle un impulso tanto a la cantera como futbolista español, mucho más barato que el extranjero en estos momentos. Los jugadores del Castilla Arribas (centrocampista ofensivo), Dotor (volante), Rafa Marín (defensa central) y Álvaro Rodríguez (delantero centro) tienen muchas papeletas para convertirse oficialmente en jugadores del primer equipo el próximo curso, a expensas de ver qué decisión se toma con Vinicius Tobías (lateral derecho, por quien habría que pagar 10 millones de euros al Shakhtar Donetsk).

Florentino Pérez, además, es consciente de que el mercado español es ahora un buen caladero ante la imposibilidad de competir con la Premier League. Bellingham, el centrocampista inglés del Dortmund, es el gran deseado, pero los 180 millones de euros en que se mueve el coste de su fichaje hacen imposible siquiera plantearse la operación. Al presidente blanco le atraen especialmente dos jugadores españoles con perfil muy ofensivo, y por ahí van a ir los tiros. Cantera y españoles. Se cierra un ciclo y se abre otro.