Un bicho se interpone entre el Real Madrid y Estambul: Haaland contra el Régimen
El delantero noruego es la gran amenaza de los de Ancelotti para alcanzar la final de Champions y seguir peleando por la Decimoquinta. Lleva 48 goles en 41 partidos esta temporada
Ida, 9 de mayo, en el Santiago Bernabéu. Vuelta, el 17 de mayo, en el estadio City of Manchester. El Real Madrid ya conoce la identidad de su rival en las semifinales de la Copa de Europa, el Manchester City, y las fechas de ambos partidos, los que dan acceso a la gran final de Estambul, el sueño de conquistar la Décimoquinta aún sigue vivo. Pero antes de llegar a la ciudad del Bósforo, los de Ancelotti tendrán que sacudirse de encima a un bicho: al 'bicho' Haaland.
Haaland es el gran terror del fútbol europeo y la esperanza para acabar con el Régimen madridista en Europa. Un delantero centro más parecido a Robocop que a un deportista de elite, con unas capacidades físicas colosales, una potencia de remate fabulosa y una capacidad goleadora fuera de toda lógica. El noruego, de sólo 22 años, lleva 48 goles en 41 partidos esta temporada, una media sólo al alcance de los mejores Messi y Cristiano Ronaldo. Sus números son dignos de un cyborg despiadado. En la Copa de Europa ha marcado 12 tantos en los ocho choques en los que participó. Es un asesino letal, un Terminator.
Desde su 1,95 de altura, Haaland, sueño dorado de buena parte del madridismo por encima incluso de Mbappé, será la gran amenaza del Real Madrid, que para colmo en el encuentro de ida de esa llave de semifinales no podrá contar con Eder Militao. El fornido y velocísimo central brasileño parecía, a priori, el más indicado para tratar de contrarrestar la potencia de un Haaland que, pese a su corpulencia, no es un delantero nueve de área. No, con su corpulencia es un delantero centro capaz de matarte en una transición velocísima aunque le amarres al USS Enterprise (el portaaviones más largo de la Armada de los Estados Unidos) a un tobillo. Haaland podrá con él, y con quien le pongan por delante. Es casi imparable.
No será, claro, el epicentro único de la eliminatoria. Por allí pululará también Pep Guardiola, santo y seña del antimadridismo patrio. El preparador de Sant Pedor y el cyborg noruego son las dos grandes esperanzas coloridas (de cualquier color que no sea el neutro blanco) para poder sacudirse de encima cuanto antes el dominio madridista en Europa. Algunos dicen que el City juega mejor sin Haaland, pero que enconces tiene menos gol. Y que con el noruego su fútbol es más básico y previsible, pero la capacidad goleadora del noruego enmascara todo lo demás. Ancelotti tiene tarea. Claro, que además de tener tarea tiene a Rodrygo, a Vinicius, a Modric, a Benzema, a Kroos... ¡Menuda eliminatoria!