Las lágrimas de Cristiano ocultan al gran héroe de la noche europea de Portugal

Portugal logró clasificarse para la ronda de cuartos de final de la Eurocopa, confirmando que hay un lado del cuadro de la competición continental que es lo más parecido a un auténtico infierno. El próximo viernes, cuatro firmes candidatos al título buscarán su lugar en las semifinales. A las 6 de la tarde se medirán Alemania y España, en lo que para muchos es una final anticipada, y después, desde las 9, Francia y Portugal se enfrentan en otro duelo entre grandes favoritos.  

Pero la selección ibérica aún sufrió más que Francia, que derrotó 1-0 a Bélgica en un mal partido que concluyó con un autogol de Vertonghen en el minuto 85 del encuentro, para clasificarse para cuartos. Portugal no fue capaz de marcar un solo gol a Eslovaquia durante los 120 minutos que duró el partido más la prórroga y solo el acierto brutal de su portero Diogo Costa en la tanda de penaltis dio el pase al equipo del español Roberto Martínez. 

El choque de octavos tuvo como gran protagonista a Cristiano Ronaldo, que intentó de todas las maneras posibles batir a Jan Oblak, cosa que no consiguió hasta la decisiva ronda de penaltis. El exjugador del Real Madrid, que a sus 39 años está disputando su sexta Eurocopa, probó suerte con varias faltas directas que fueron rechazadas por el portero del Atlético de Madrid y demostró una ansiedad fuera de todo límite que lo único que hizo fue ir en contra los intereses de su equipo. 

Decepcionó absolutamente el equipo entrenado por el español Roberto Martínez que, incluso, vio como pudo quedar apeado de la Eurocopa en los últimos minutos del encuentro cuando Sesko aprovechó un error infantil de otro exmadridista, Pepe, para situarse frente a frente con Diogo Costa, que realizó el primer milagro de su noche más triunfal. 

Fallo de Cristiano y lágrimas de impotencia

Con el encuentro ya en la prórroga, el árbitro señaló un claro penalti de la defensa eslovena sobre Diogo Jota, que Cristiano Ronaldo se encaminó a lanzar. Como en aquella tanda de la Champions de Milan de 2016, Cristiano y Oblak, de nuevo, frente a frente. Pero, en esta ocasión, el paradón del portero del Atlético hundió en la miseria al astro de Madeira, que no pudo evitar que las lágrimas de impotencia recorrieran sus mejillas. Sin alivio posible, uno a uno los compañeros de Cristiano trataron de animar a su referente, que no pudo salir del tremendo agobio en el que estaba hasta que transformó, ahora sí, el primer penalti de la ronda definitiva. 

"Los que fracasan son también los que lo intentan. Obviamente es frustrante cuando no marcamos. Pero ya lo he olvidado, porque el resultado final fue positivo y eso es lo más importante. A veces es difícil marcar de penalti, pero este año he perdido dos veces en los penaltis, hoy he ganado, el fútbol a veces tiene que ser justo y hoy lo ha sido", comentó Cristiano una vez concluido el encuentro. 

"Los que fracasan son también los que lo intentan"Cristiano Ronaldo

"Hay que felicitar al equipo, especialmente al portero, que hizo tres paradas muy buenas", dijo el exjugador del Real Madrid, quien reconoció que, "sin duda", será "mi última Eurocopa. 

Sin embargo, el verdadero y único héroe de la clasificación de Portugal para los cuartos de final fue Diogo Costa. El joven portero del Oporto vivió la noche de su confirmación absoluta. Si ya en el último tramo del encuentro había salvado a su país con el paradón ante Sesko, su exhibición en los lanzamientos de penalti fue absolutamente legendaria. Detuvo los tres penaltis eslovacos, con estiradas de enorme mérito, y solo tuvo que esperar a que sus compañeros acabaran batiendo a Oblak.