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Messi desencadena una crisis en el gabinete de Milei por los franceses

Argentina celebró la conquista de la Copa América con un cántico ofensivo contra los galos, desencadenando una crisis diplomática primero, otra deportiva después y ahora, gubernamental

Leo Messi, en una imagen de la pasada Copa AméricaDPA vía Europa Press

Publicado por
Sandra Sánchez

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"Escuchen, corran la bola, juegan en Francia pero son todos de Angola; qué lindo es, van a correr, son cometrabas como el p** Mbappé; su vieja es nigeriana, su viejo camerunés, pero en el documento nacionalidad francés". Esta canción, que hizo viral durante el Mundial 2022 entonada por aficionados argentinos, ha desatado una crisis sin precedentes en el país de la albiceleste: diplomática, deportiva y gubernamental.

Argentina conquistó la Copa América el pasado domingo, en Estados Unidos, tras imponerse en la final a Colombia. Y en la celebración, dentro del autobús de los de Scaloni (la Scaloneta), Enzo Fernández fue sorprendido cantando ese mismo tema. El terremoto acababa de empezar.

Inmediatamente tras tener conocimiento del cántico, cuya emisión en directo fue cortada pero un internacional galo que la estaba siguiendo grabó, la Federación Francesa, dependiente del Ejecutivo francés, emitió un durísimo comunicado en el que acusaba de que iba a denunciar a los jugadores de la Selección argentina por actos racistas y homófos. Y a partir de ahí, el apocalipsis.

Colonialismo, Enzo, Messi, ceses... el caos 

Nada más tener conocimiento de las acusaciones de la Federación Francesa, la política argentina entró en acción. Primero, la vicepresidenta Victoria Villarruel, quien acusó a Francia de colonialista y de hipócrita a través de su cuenta de X (antes Twitter). Mientras, el subsecretario de Deportes del país, Julio Garro, entrevistado en una televisión, pedía a Messi, como capitán de la selección, y a la Federación Argentina que se disculparan por el cántico ante Francia. "Nos deja en mal lugar ante el mundo", dijo Garro.

No lo consiguió. Pidió perdón Enzo Fernández, jugador argentino que fue el instigador de los cánticos, pero eso no evitó que los futbolistas de color de su equipo, entre ellos el internacional francés Fofana, decidieran dejar de seguirle en redes sociales. Lo que no sabía Garro es que esas declaraciones en televisión le costarían el cargo.

Porque fue cesado en la noche, pese a que tuvo que retractarse antes para decir que "nadie puede decirle a Messi lo que tiene que hacer". El propio Javier Milei, tan activo en redes, reposteó el comentario de un aficionado en la misma línea. Y acabó la Oficina del Presidente anunciando el cese de Garro. "ningún gobierno puede decirle qué comentar, qué pensar o qué hacer a la Selección Argentina", decía su comunicado,

Todo esto, en solo 24 horas. Los cánticos de celebración están empezando a ser un problema ante el pensamiento único. El "Gibraltar Español" de La Roja en Cibeles provocó el morrocotudo enfado del primer ministro de Gibraltar. Y ahora, un cántico igual de irreverente que de inofensivo ha sido el desencadenante de una tormenta en Argentina. Ver para creer.