Florentino Pérez se relame en su despacho: la justicia pone cerco a los clubes-estado
Manchester City y París Saint-Germain han sufrido estos últimos días diferentes reveses judiciales que podrían afectar a su modelo de negocio, criticado desde hace años por el presidente del Real Madrid
Florentino Pérez se relame en su despacho de la última planta del edificio de ACS. O acaricia un gatito, que viene a ser lo mismo pero en jerga más juvenil. El presidente del Real Madrid observa desde la distancia cómo la justicia estrecha el cerco sobre el Manchester City y el París Saint-Germain, los dos clubes más despreciados por el máximo mandatario blanco.
Florentino Pérez siempre se refiere a ellos con un despectivo término que incluso terminó por calar en la jerga del aficionado de a pie: clubes-estado. Entidades deportivas sostenidas mediante subterfugios por los gobiernos de diferentes países, que pueden inyectar de manera artificial (contratos de patrocinio fuera de mercado, pago de parte de los salarios de los jugadores mediante contrataciones por el país, ...) cantidades ingentes de dinero para hacer de clubes de medio pelo a equipos campeones.
Pero ahora, la justicia interviene. En el caso del Manchester City, con una investigación exhaustiva por un posible caso de "dopaje financiero" de consecuencias imprevisibles. En el caso del PSG, tras conocerse que uno de sus formadores en la cantera podría haber incurrido en un delito de "corrupción de menores".
El City, a la espera de la bomba
El Manchester City aborda el llamado "juicio del siglo" a nivel deportivo. El equipo mancuniano está siendo investigado por 115 posibles delitos cometidos entre 2009 y 2018 y relacionados con el fair-play financiero. La denuncia se presentó en 2023, tras cuatro años de investigaciones, y se espera que la resolución final se tome en alrededor de diez semanas.
Las consecuencias del juicio son imprevisibles, Se acusa al Manchester City de inflar artificialmente el valor de los acuerdos de patrocinio y de realizar pagos secretos al entrenador Roberto Mancini y al entonces agente de Yaya Touré, además de obstruir todas las investigaciones que desde 2019 se llevan a cabo sobre el club. El City siempre ha negado haber actuado de forma irregular.
El club inglés ya fue sancionado por la UEFA en 2019 por el mismo motivo y se le prohibió participar en competiciones europeas durante dos años, decisión que revertió el Tribunal de Arbitraje Deportivo. La entidad, cuya propiedad ostenta la familia real de Abú Dhabi, se expone tanto a ser desposeído de sus títulos en ese periodo, a una multa económica, a ser expulsado de las competiciones inglesas o a sufrir una pérdida de puntos en el comienzo de cada temporada.
PSG: corrupción de menores
Mientras, y según adelantó Radio MonteCarlo, un educador de la cantera del París Saint-Germain ha sido procesado por supuestamente haber cometido un delito de corrupción de menores. El sospechoso, de 27 años, fue suspendido de empleo y sueldo por el conjunto parisino en cuanto tuvo constancia de los hechos, aunque ha trascendido que ya fue condenado a seis meses de prisión en el pasado por hechos similares.
Según RMC, al menos media docena de jugadores de la cantera del PSG denunciaron que el preparador hizo distintos acercamientos extraños a jóvenes entre 14 y 16 años. Algunos, incluso, se quejaron de que les pedía fotos de sus pies, además de ofrecer masajes y besos. También habría solicitado a varios futbolistas del centro de formación vídeos sexuales con sus novias, interrogándoles sobre sus gustos sexuales.
El PSG es propiedad de la familia real de Catar y también ha tenido sus líos a causa de saltarse las normas del Fair Play financiero, aunque este caso es mucho más grave que simplemente inflar con billetes impostados un balance económico.