Bochorno ultra en el Metropolitano con Simeone echando gasolina al fuego

Todo iba bien hasta que Militao abrió el marcador de un derbi mucho más equilibrado que brillante. Hasta ese momento, el partido se había desarrollado en el entorno típico de un derbi con récord de asistencia en el Metropolitano, más de 70.000 espectadores, y Atlético y Real Madrid con interés por aprovecharse de la derrota blaugrana del sábado en Pamplona. 

Militao marcó en el minuto 64 y solo cuatro minutos después el colegiado del encuentro decidió suspender el encuentro después de que varios objetos, especialmente mecheros, cayeran de la grada del fondo sur del Metropolitano con destino al portero del Real Madrid Thibaut Courtois, ex del Atlético de Madrid. Busquets Ferrer cumplió a la perfección el protocolo y, después de una llamada al delegado y el consiguiente aviso por la megafonía, ordenó a los jugadores abandonar el terreno de juego al constatar que continuaba el lanzamiento de objetos sobre el portero belga.  

Lo hicieron todos menos, en un primer momento, Koke, Jiménez y el propio Cholo Simeone, que trataron de calmar a los ultras del Atlético, algunos enmascarados, para que cesaran en su actitud agresiva ante Courtois. Tras un parón de 20 minutos, el encuentro se reanudó y Correa acabó firmando las tablas en el cuarto de los ocho minutos que decidió prolongar el árbitro del encuentro. 

El encuentro concluyó y los futbolistas del Atlético de Madrid fueron, como acostumbran tras la conclusión de los partidos, a ese mismo fondo sur a agradecer el apoyo. En ese momento, el resto del estadio, que ya había desaprobado el comportamiento de los ultras, volvió a recriminarles el lanzamiento de objetos y a los propios jugadores que fueran, precisamente, a ese lugar de la grada, causante del parón del partido y del bochorno del club ante media Europa.  

En la sala de prensa, un desafortunadísimo Simeone decidió echar gasolina al fuego. Si bien es cierto que comenzó censurando la actitud de los ultras del Frente Atlético, "no necesitamos de esa gente en nuestra tribuna. Necesitamos de la gente que nos impulsa, que nos acompaña, que nos apoya, que piensa en el club y en el equipo. Necesitamos de esa gente", puso en el objetivo a Courtois. "Para mí, sanción al que provoca. Así, equilibramos". 

Es cierto que las imágenes demuestran la alegría de Courtois justo después de que Militao inaugurara el marcador y los gestos que dedicó a la grada del fondo sur del Metropolitano que, por supuesto, estuvo insultando gravemente al que fuera portero del Atleti durante todo el partido. 

El Frente Atlético, impune para los dueños del Atleti

Como no podía ser de otra manera, el árbitro recogió en el acta todo lo sucedido y lo más normal es que esa zona de la grada del Metropolitano sea clausurada durante varios encuentros. Por su parte, el Atlético de Madrid, incapaz desde hace décadas de expulsar de su club a los miembros más ultras del Frente Atlético, anunció a última hora de la noche del domingo que ya había identificado a uno de los agresores y que tomaría las medidas oportunas. 

"El Atlético de Madrid quiere mostrar su rechazo por el lanzamiento de objetos que se ha producido desde una parte de la grada del fondo sur en el minuto 68 del encuentro ante el Real Madrid. Desde el mismo momento en el que se produjeron dichos lanzamientos, el departamento de Seguridad del club está trabajando junto a la Policía para la localización de los implicados, uno de los cuales ya ha sido identificado. El club aplicará el régimen interno previsto para casos muy graves a las personas que hayan estado implicadas en este incidente. Estas actitudes no tienen cabida en el fútbol y manchan la imagen de un estadio que ha vivido un ambiente espectacular con más de 70.000 espectadores en sus gradas y que han mostrado un comportamiento ejemplar en su inmensa mayoría", dice el comunicado del Atlético de Madrid.