ESdiario

Hecatombe española en la Champions: pierden Real Madrid, Atlético y Girona

Calamitosa jornada de miércoles para los equipos de LaLiga: los de Ancelotti no juegan a nada en Lille, los rojiblancos se llevan un revolcón (4-0) ante el Benfica y la mala suerte fustiga a los de Míchel

Endrick fue titular en Lille, donde el Madrid salió derrotado

Endrick fue titular en Lille, donde el Madrid salió derrotadoDPA vía Europa Press

Publicado por
Miguel Queipo de Llano

Creado:

Actualizado:

Fue una jornada aciaga esta del miércoles para los equipos españoles. Tres partidos, tres derrotas. Cada una con su historia. La mala suerte (y el árbitro) se cebó con el Girona en su estreno europeo en Montilivi, lo que llevó a perder (2-3) ante el Feyenoord. Y los dos equipos madrileños, Real Madrid y Atlético, hicieron el ridículo a domicilio. Los de Ancelotti cayeron (1-0) ante el Lille en un partido en el que jugaron mal y andando, mientras que el Atlético fue arrasado por el Benfica en Lisboa (4-0).

Madrid transparente

Empezamos por el Madrid, vigente campeón de Europa, pero jugando como en Francia tiene cero opciones de revalidar la corona. Ancelotti agitó el banquillo para darle minutos a algunos meritorios: Endrick fue titular por Rodrygo, Camavinga entró por Modric. Pero no sirvió de nada. Los blancos jugaron con esa autosuficiencia de que el escudo tritura todo a su paso. Pero no: hay que ponerle ganas e incluso algo de fútbol.

Los de Ancelotti no fueron absolutamente nada durante el partido, si acaso la demostración de que Lunin, titular por la lesión de Courtois, sigue a un nivel magnífico. El resto es casi mejor no comentarlo, pese al arreón en el alargue que les llevó a tener cuatro ocasiones, las únicas del partido. Nada por delante, nada por detrás. El Real Madrid hace menos ruido que un concierto en el Bernabéu. Los 'dogos' del Lille se comieron el hueso blanco simplemente poniendo ganas y aprovechando un claro penalti por mano de Camavinga en la última jugada del primer tiempo, que transformó Jonathan David.

Es cierto que los títulos se reparten en mayo y que el Madrid, es lo que tiene ese club, andará por ahí molestando. Pero la imagen fue penosa. Un alma en pena. El equipo aparece desubicado, desenchufado, sin hambre y Ancelotti, por primera vez en esta etapa en el banquillo blanco, luce errático, triste y sin soluciones. La derrota 1-0 en esta nueva Champions, la de miles de goles y resultados inesperados, no se sabe si es malo, malísimo o regulinchis para la clasificación, pero la imagen sí que fue espantosa, para olvidar.

Bochorno rojiblanco sin mecheros

Claro, que peor fue lo del Atlético. Simeone, con ese traje que le pone a los rojiblancos en Europa, demostró que para la Champions no es buen sastre: cinco defensas y el mejor del equipo, pese a que encajó cuatro goles, fue Oblak. Akturkoglu, Bah, De María y Kokcu, estos dos últimos de penalti, no sólo tiraron de la sisa al planteamiento del Cholo, sino que lo dejaron sin mangas: el rey desnudo.

Y eso que el Atlético no jugó mal el primer tiempo, pero un error defensivo de juveniles les puso por detrás en el marcador y desde ahí, no hubo mechero para prender la llama, y perdón por la mala gracia el día que el Comité de Competición cerró por tres partidos la grada del Fondo Sur del Metropolitano por el lanzamiento de objetos en el pasado derbi madrileño.

Los cambios de Simeone no sólo no mejoraron al equipo, sino que directamente sirvieron para entregar la cuchara. Quitó a Griezmann, que es el mejor jugador de su equipo a años luz del siguiente aunque juegue con dos muletas; a Koke, que al menos tiene carácter y a un De Paul que, él sí, es para santiguarse cada vez que juega: espantoso. Pero tiró a los leones a un chaval, Javier Serrano, del que nadie se explica la fe que le tiene el Cholo. Una derrota dolorosa, que además en este nuevo formato de Champions, al ser tan amplia, puede ser terrible para el futuro europeo de los rojiblancos.

Harakiri del Girona

Por su parte, el Girona pecó de inexperiencia en su debut europeo en Montilivi, ante un clásico con más nombre que fútbol como el Feyenoord. Los de Míchel se adelantaron en el marcador, pero luego todo se les volvió en contra: se marcaron dos autogoles, fallaron un penalti (los holandeses, otro), el árbitro no anduvo demasiado acertado... y el 2-3 final no hace justicia, pero sí sirve para darle un toque al equipo rojiblanco: en Europa no puedes perdonar y mucho menos regalar. Lo mismo que olvidaron Madrid y Atleti en este aciago miércoles.

tracking