El Athletic no reculó y homenajeó al montañista que llevó a ETA hasta la cima del Everest
Martín Zabaleta fue homenajeado por el club vasco antes del inicio del choque que los de Bilbao disputaron ante el Espanyol
Estos días se ha vivido con polémica en Bilbao y en el resto de España, ya que el Athletic había anunciado que Martín Zabaleta y Pasang Tema harían el saque de honor en San Mamés antes del inicio del choque de la jornada 10 frente al Espanyol. El gran problema surgía cuando el montañista había lucido una ikurriña en la cima del Everest, pero lo llamativo de esta imagen es que tenía el logo del hacha y la serpiente de la banda terrorista ETA.
Hay que remontarse al 14 de mayo de 1980 cuando Martín Zabaleta y el sherpa Pasang Tema alcanzaron la cita del Everest, la más alta de todo el planeta. El montañista vasco, como se suele hacer en estos casos, plantó la bandera del País Vasco, pero en ella estaba el logo de ETA y también un mensaje antinuclear. Ese mismo año fue el más sangriento de esta banda terrorista con más de 90 asesinatos.
El anuncio hace unos días por parte del Athletic Club ha generado una controversia brutal, ya que la herida que dejó ETA en nuestro país aún no se ha cerrado. Multitud de organizaciones que defienden a las víctimas del terrorismo y el país que ha sufrido la violencia de esta banda terrorista no han visto con buenos ojos este homenaje a una persona que lució con orgullo el logo del grupo terrorista.
Pese a las críticas que le habían llegado al club vasco por este homenaje, el Athletic siguió adelante y homenajeó a Martín Zabaleta. En unas semanas y meses en los que se busca luchar contra las lacras del racismo o la violencia en los terrenos de juego, el conjunto de Bilbao decidió que el montañista se llevará un homenaje cuando había mostrado su apoyo a ETA con esa bandera que llevó a la cima del Everest.
El homenaje escondido
Pese a todo lo que rodeaba a este homenaje a Martín Zabaleta, LaLiga de Javier Tebas no lo ha evitado, pero sí que impidió que se viera por televisión. La realización del partido optó por planos amplios y de recurso para que no se viera nada y prácticamente sólo los que estuvieron en San Mamés pudieron verlo, aunque es cierto que el Athletic lo compartió posteriormente en las redes sociales.
Por su parte, el Espanyol no se unió a este homenaje y los futbolistas no le hicieron el habitual pasillo que se le suele hacer a las personalidades que hacen el saque de honor. Sí se lo hicieron los jugadores del Athletic Club, pero, obviamente, este acto pasará sin pena ni gloria, aunque siempre estará ahí en la imagen de este histórico club de nuestro país.