Una decepcionante España vuelve a empatar y se lo jugará todo contra Eslovaquia

España sigue sin encontrar opciones en el campo. Los titulares no rinden como se espera y ningún suplente da señales de que puedan revolucionar un partido. Los de Luis Enrique se la vuelven a pegar tras no pasar del empate a 1 frente a Polonia y si quieren estar en octavos tendrán que ganar sí o sí a Eslovaquia el miércoles. Suecia lidera el grupo E y solo una victoria de Polonia en la tercera jornada y que España haga lo propio permitirá que la Selección pueda pasar primera de grupo.

Los polacos comenzaron la primera parte del encuentro conscientes de su situación y no dejaron mover la bola a nuestros futbolistas. Durante los primeros 15 minutos, la presión de los de Sousa fue intensísima, aunque no crearon problemas a Unai Simón. Tampoco lo hizo la Selección con Szczesny. Cumplido el ecuador de la primera parte, solo Pau Torres intentó probar al meta con un tiro muy lejano, que se fue todavía más lejos.

No obstante, España dominaba ya el partido y en el minuto 25, tras una revisión del VAR, Morata obtuvo su premio después de llevar cinco días en el centro de la diana. Gerard Moreno chutó desde casi el pico del área y el balón le llegó al delantero de la Juve, que solo tuvo que empujarla. En cuanto el árbitro dijo que el gol valía, Morata se fue directo a abrazar a Luis Enrique, su firme defensor durante esta semana.

Swiderski dio un susto a Unai Simón cuando faltaban 9 minutos para el final de la primera mitad. Pero ha sido en el 42' de encuentro cuando nos hemos llevado las manos a la cabeza. Swiderski, de nuevo, le pegó con el alma y el balón dio en el palo. El rebote le cayó a Lewandowski, que estrelló el esférico ante un Unai Simón que se hizo grande. Estarán los polacos contentos con el delantero, que ha recibido por todos los lados durante estos días.

Gerard Moreno estuvo a punto de ampliar la ventaja de España casi al final de la primera parte después de un gran pase de Pedri a Jordi Alba y un centro del lateral, pero la bola se marchó por muy poco.

La segunda parte comenzó exactamente igual que la primera. Los polacos mordiendo, pero esta vez encontrándose con el gol. Lewandowski remató de cabeza frente a un vencido Laporte y superó a Unai Simón. Apenas dos minutos después, el colegiado señaló penalti para España tras un pisotón claro sobre Gerard Moreno. El delantero del Villarreal pidió el balón, lanzó la pena máxima y estrelló el balón en el palo.

El rechace le cayó a Morata, que solo tenía que empujarla, y la mandó fuera. Una de cal y otra de arena es lo que lleva ofreciendo el ariete durante casi toda su carrera. Ahora no iba a ser menos. Es cierto que trabajó en defensa, aguantó bien el balón, pero su trabajo no lo hace como se espera. A partir de ahí, la nada. Polonia jugando a lo que tenía que jugar, bien juntitos y sin dejar huecos, y España sin opciones.

Ni Fabián, ni Ferrán Torres, ni Sarabia, ni Oyarzabal, que entraron en la segunda mitad, daban señales de frescura ni de que pudiesen cambiar el partido. Nuevo golpe para España, que así lo mejor que le puede pasar es que no se alargue más la ironía y nos pinte la cara una selección mayor.