El Banco Popular se aferra a su negocio tradicional
El CEO de la entidad no tiene dudas de que su plan de reestructuración les permitirá evitar ser absorbidos, pero la realidad es que han ganado tres veces menos y se esperan cifras peores.
Pedro Larena ha comenzado hoy la presentación de resultados ante la prensa con fuerza, asegurando que tienen “un bancazo” a la vista de los números de su negocio tradicional, sin parangón en el sector asegura, pero la realidad es tozuda y su “losa inmobiliaria” pesa demasiado por mucho que traten de aislar sus cifras. Es por ello que la acción cotiza hoy cerca de los mínimos históricos después de que hayan anunciado que el Banco Popular registró un beneficio neto atribuido de 94,3 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 66,1% menos que el mismo periodo del año anterior. La entidad no esconde que presentará pérdidas a final de año, y los analistas están preocupados.
El banco ha explicado que constituyó provisiones netas por importe de 1.021 millones de euros, destinando para ello la totalidad del beneficio del segundo y el tercer trimestre, todo ello con el objetivo de acelerar el ritmo de desinversiones de activos no productivos y potenciar las fortalezas del negocio principal. Al anticipar dichas provisiones, el beneficio reportado en el primer y segundo trimestre estanco ha sido cero, por lo que el beneficio neto acumulado hasta septiembre corresponde únicamente al del primer trimestre: 94 millones de euros.
El margen de intereses experimentó un descenso del 6,3% respecto al mismo periodo del año anterior, alcanzando 1.580 millones de euros, una variación que tiene su origen en el impacto de la eliminación de las cláusulas suelo y a la menor actividad de la cartera de renta fija. El margen bruto del Banco Popular se situó en 2.348 millones de euros, un 12,2% menos que en los nueve primeros meses de 2015.
Popular ha informado que la actividad principal registró un beneficio 817 millones de euros hasta septiembre, mientras que el negocio inmobiliario y asociado generó unas pérdidas acumuladas de 723 millones de euros.
No abren la puerta a fusiones
El consejero delegado de Banco Popular, Pedro Larena, afirmó que "no estamos analizando, ni mucho menos, ninguna" operación de fusión con otra entidad financiera, y agregó que "estamos centrados en nuestro proyecto". Larena indicó que el banco está centrado en el "plan A, el único que hay". En este sentido, subrayó que se va a seguir fomentando el negocio principal y manejando menos volumen de activos improductivos y de negocio inmobiliario.
Preguntado, en concreto, por si algún consejero del Popular había propuesto una fusión con Banco Sabadell, Larena señaló que no le consta. "Que yo sepa ningún consejero ha propuesto una fusión con el Sabadell", indicó. Respecto a las alternativas que analiza el FROB para BMN, entre las que se encuentra una fusión con Bankia, señaló que el organismo como dueño puede hacer lo que considere. En todo caso, el consejero delegado de Banco Popular subrayó que "sería de agradecer un proceso más transparente y de mercado".
Larena ha avanzado que la entidad tiene previsto tener constituida la estructura de su entidad especialista en gestión inmobiliaria en el primer trimestre de 2017, creando una especie de “banco malo”. El Popular planea crear una sociedad independiente de la entidad para acoger un volumen de activos brutos cercano a los 6.000 millones de euros y tiene la intención de sacarla a bolsa. "Tenemos la experiencia de nuestra ampliación de capital hace pocos meses, que ha sido un éxito. Queremos dar liquidez al accionista, que va a tener una participación sin desembolsar ningún dinero en esta nueva empresa", ha destacado Larena.