El ladrillo sigue atrayendo inversores
Según el último informe de Cushman&Wakefield, el sector inmobiliario comercial español recibirá unos 4.600 millones de capital extranjero en 2017, lo que nos vuelve a situar positivamente.
Somos uno de los principales destinos de capital inmobiliario. Es un hecho. El capital extranjero invertirá este año unos 5.000 millones de dólares (unos 4.632 millones de euros) en el sector inmobiliario comercial español, según el último informe internacional ‘Great Wall of Money’ publicado por Cushman & Wakefield. Esta cifra, que se mantiene en línea con la del año anterior, hará que España se sitúe en la posición número 13 del ranking de principales destinos de capital inmobiliario.
A nivel mundial, la compañía cree que el volumen de capital añadido para la inversión inmobiliaria alcanzará este año los 435.000 millones de dólares (unos 403.019 millones de euros), cifra que es menor que la de 2016, pero que continúa siendo la segunda cifra más alta desde 2009. El volumen global de capital recientemente captado dirigido al inmobiliario a nivel global, tanto por la vía de deuda como la de patrimonio, ha disminuido un 2% en comparación con 2016, la primera caída desde 2011.
No obstante, los niveles actuales son los segundos más altos registrados, lo que refleja un aumento extraordinario de capital dirigido hacia el sector durante este ciclo. El capital invertido en la región EMEA se reducirá un 9%, hasta los 130.000 millones de dólares (120.406 millones de euros), mientras que en América aumentará un 2%, hasta los 173 millones de dólares (160 millones de dólares) y en el continente asiático se incrementará ligeramente y se situará en los 132.000 millones (122,2 millones).
El responsable en la región EMEA Research & Insight de Crushman & Wakefield, Elisabeth Troni, espera que 2017 esté marcado por la competencia constante en la asignación de capital y la localización de oportunidades “atractivas”. Por su parte, el responsable de EMEA Capital Markets Research, Nigel Almond, ha señalado que el crecimiento de capital orientado hacia la región Asia-Pacífico es una de las tendencias más notables. “Esto refleja la madurez y el crecimiento de las oportunidades en toda la región, además de las perspectivas de rentabilidad atractivas”, ha afirmado.