El Banco de España augura un mayor descenso del paro
En base a nuevas previsiones los ritmos elevados de creación de empleo de nuestro país cifran la tasa de paro en el 16,5% para finales de 2017, 2 décimas menos que en la estimación anterior.
Por si este dato aislado fuera poco, el desempleo seguirá cayendo en 2018 (14,7%) y en 2019 (13,2%), siete décimas menos que las previsiones previas en ambos años. Las nuevas previsiones del Banco de España incorporan también el mantenimiento de ritmos elevados de creación de empleo, que se irán moderando conforme avance el periodo de proyección, en consonancia con el menor crecimiento. Con todo, la tasa de paro se reducirá al 16,5% a finales de 2017, dos décimas menos que en la estimación anterior, y seguirá cayendo en 2018 (14,7%) y en 2019 (13,2%), siete décimas menos que las previsiones previas en ambos años.
A su vez, el empleo crecerá un 2,9% este año, tres décima más que la previsión anterior, mientras que se moderará al 2,3% en 2018 (cuatro décimas más que la estimación previa) y al 1,8% en 2019, el mismo pronóstico que en marzo.
Por lo que respecta a los datos de consumo, se espera que la ralentización del IPC observada desde el mes de marzo, relacionada con la evolución del componente energético, se prolongue a lo largo del resto del año. Posteriormente, la inflación repuntaría de forma moderada. De este modo, tras crecer un 2% de media anual en 2017, algo inferior a lo previsto anteriormente, repuntará un 1,3% en 2018 y un 1,6% en 2019.
La cifra de ocupados en la Unión Europea alcanza las 234,2 millones de personas, de las que 154,8 millones corresponden a la zona euro, lo que representa en ambos casos un nuevo máximo histórico, según los datos publicados por Eurostat.
El empleo en la eurozona y en el conjunto de la UE experimentó durante los tres primeros meses del año un crecimiento del 0,4% respecto al trimestre anterior, cuando se incrementó en la misma proporción en ambos casos. En comparación con el primer trimestre del año pasado, el empleo en la zona euro registró un crecimiento del 1,5%, mientras que en el caso de la UE el aumento fue del 1,4%.
Entre los países cuyos datos estaban disponibles, Estonia (2,8%), Malta (1,7%), Suecia (1,2%) e Irlanda (1,1%) registraron los mayores incrementos trimestrales del empleo, mientras que Letonia (-1,9%), Rumanía (-1,2%), Croacia (-0,6%) y Lituania (-0,5%) experimentaron descensos. En comparación con el primer trimestre de 2016, los mayores incrementos del empleo se observaron en Malta (6%), Irlanda (3,5%) y Chipre (3,4%), mientras Letonia (-2,8%), Lituania (-0,4%) y Rumanía (-0,4%) registraron caídas del empleo.
En el caso de España, el empleo aumentó durante el primer trimestre un 0,7% respecto a los tres meses anteriores, por encima del ritmo observado en Alemania (0,5%), Italia (0,3%) o Francia (0,2%), mientras que en términos interanuales el empleo en España aumentó un 2,4%, frente al 1,5% de Alemania, el 1% de Italia o el 0,7% de Francia.
Por el lado de la economía el Banco de España ha revisado tres décimas al alza tanto la estimación de crecimiento del PIB en 2017 como en 2018, hasta el 3,1% y el 2,5%, respectivamente, debido a que la evolución reciente en el ámbito nacional e internacional es “más favorable” que la anticipada previamente. Para 2019, mantiene la previsión de crecimiento en el 2,2%.
El avance del PIB, destaca el Banco de España en sus proyecciones para la economía española en el periodo 2017-2019, continuará sustentándose en la demanda nacional, para la que, no obstante, se prevé una prolongación de la desaceleración observada en 2016. Por su parte, la demanda exterior neta continuaría ejerciendo una contribución positiva a lo largo del horizonte de proyección.
No obstante, advierte de que el cambio de orientación de la política presupuestaria, tras el tono expansivo ejercicio en los dos últimos ejercicios, y la expectativa de que las condiciones financieras y monetarias no sean tan laxas como en el pasado darán lugar a una moderación en el ritmo de expansión de la economía, desde el 3,1% este año hasta el 2,2% en 2019.
Déficit público
En cuanto al déficit público, el Banco de España estima que se situará en el 3,2% este año, una décima más que el objetivo comprometido con Bruselas, pero 1,3 puntos por debajo de la cifra de 2016, debido a la mejora del ciclo económico, en un contexto en que la orientación de la política fiscal sería neutral. La corrección del desequilibrio presupuestario continuará en los dos próximos años, de modo que el déficit público se situará a partir de 2018 por debajo del 3%.
La autoridad monetaria destaca que los riesgos en torno a la senda de evolución del PIB se encuentran predominantemente orientados a la baja y, en su mayor parte, tienen su origen en la esfera internacional. Así, apunta a una intensificación de las tendencias proteccionistas que han comenzado a despuntar en algunos ámbitos y que tendrían consecuencias negativas sobre las exportaciones españolas fuera de la Eurozona.