Dimas Gimeno se mantiene fiel a los designios de Isidoro Álvarez

Dimas Gimeno no está interesado en ninguna oferta económica para dejar la presidencia de El Corte Inglés y su intención es continuar al frente del gigante de la distribución para garantizar su modernización y profesionalización, algo que no comparte parte del consejo de administración. El actual presidente sigue centrado en su objetivo de modernizar los órganos de gestión de la compañía, el consejo de administración y el patronato de la Fundación Ramón Areces así como darle continuidad a la imparable y necesaria actualización de su pata de ecommerce.

Gimeno, que ha visto paralizadas todos las iniciativas de digitalización que ha tratado de impulsar, se siente “responsable” de la continuidad del proyecto que dejó en sus manos Isidoro Álvarez, quien confió en él para tomar el timón de los grandes almacenes. El presidente de El Corte Inglés defiende su continuidad en la compañía, a la que quiere dotar de una gestión “transparente, moderna y profesionalizada”, con la mirada puesta en una próxima salida a Bolsa, tras la entrada del exprimer ministro de Qatar, Sheikh Hamad bin Jassim Al Thani, quien podría elevar su participación del 10% a aproximadamente el 14%, una decisión que podría verse influida por la actual situación.

La visión de Gimeno dista mucho de la que tiene una parte del consejo de administración, es decir, las hermanas Álvarez, los dos consejeros delegados, Víctor del Pozo y Jesús Nuño de la Rosa y Florencio Lasaga y Carlos Martínez Echevarría. De hecho, los seis consejeros han trasladado a Gimeno, a través del secretario del órgano de dirección, Antonio Hernández-Gil, su petición de convocar un consejo en cuyo orden del día se incluya su cese o destitución, si bien se trata de una solicitud oral, sin que se haya hecho a través de un burofax o ante notario con la firma de los consejeros. En el momento en que reciba esta petición, dispone de un plazo de 30 días para convocar la reunión del consejo en la fecha que considere oportuna.

Gimeno, que se encuentra a la espera de la auditoría de EY sobre la gestión en el área de seguridad del grupo de distribución, es consciente de las dificultades a las que se enfrenta, si bien tiene claro que “peleará hasta el final”. Además, la posibilidad de que Marta Álvarez asuma la presidencia de El Corte Inglés no es compartida por todos los accionistas ni por todos los miembros del consejo de administración, por lo que la batalla continuará.

Los principales accionistas de El Corte Inglés son la Fundación Ramón Areces, con un 37,39%; Cartera de Valores IASA, sociedad patrimonial controlada por las hermanas Marta y Cristina Álvarez, con un 22,18%; Mancor -vinculada a la familia García Miranda- (7%); Ceslar -familia Areces- (9%), y Primecin -vinculada al jeque catarí Sheikh Hamad bin Jassim Al Thani, que en la próxima junta pasara a ostentar entre el 10% y el 12% del capital.

El consejo de administración de El Corte Inglés está compuesto actualmente por Dimas Gimeno, Florencio Lasaga, Carlos Martínez Echevarría, Cristina y Marta Álvarez, Manuel Pizarro, Víctor del Pozo, Jesús Nuño de la Rosa, Shahzad Shahbaz -representante del jeque catarí- y Paloma García Peña.