Extremadura podría ser la nueva EuroVegas

El Gobierno socialista de Guillermo Fernández Vara, partido que tanto crítico las actuaciones de Esperanza Aguirre en Madrid para tratar de facilitar que EuroVegas fuera una realidad, extiende ahora una “alfombra roja” a nivel burocrático para favorecer la posible llegada de diferentes proyectos relacionados con los juegos y las apuestas. Extremadura es la tercera región con más paro de toda la Unión Europea, y renunciar a una lluvia de empleo como la que esta inversión supondría es algo que no se pueden permitir con las elecciones a la vuelta de la esquina.

Esta es la razón de ser del nuevo proyecto de ley registrado por el PSOE y presentado a los medios por el presidente de la Junta de Extremadura, que se está tramitando ahora en la Asamblea. El modelo Las Vegas es el que anhelan para La Siberia extremeña, “necesitamos pensar en grande y tener grandes proyectos”, afirmaba Vara ante los periodistas, a los que también confirmó que ha habido varios proyectos que han ido llegando, tanto de capital nacional como internacional, que plantean una oferta de “ocio familiar”. Y justificó las razones de la idoneidad de la región en el sol, el agua y un precio de la vivienda razonable, apuntando que estas inversiones necesitan sin embargo “papeleos rápidos”.

La iniciativa que más interés tiene por implantarse en la comarca al noreste de la provincia de Badajoz es ‘EuroDreamResort’, de Triple Five WorldWide Group. La Junta de Extremadura, que no ha querido hacer declaraciones dando por válida la versión del PSOE, evita hablar expresamente de ruleta en vivo o casinos. Pero hasta ocho veces se menciona esta palabra en el proyecto de ley, mientras que la expresión “ocio familiar” solo aparece en una ocasión. También es significativo la frecuencia con la que figuran citados los conceptos juegos y apuestas.

Desde el Grupo Socialista en la Asamblea de Extremadura, el encargado del registro de la ley, mantienen que el interés de distintos grupos de inversión en ocio familiar requería una legislación de la que no había preexistencia, explica su portavoz, Valentín García. Es por ello que buscan abiertamente crear un entorno fiscal más favorable para la implantación de estos complejos, ofreciendo una reducción ostensible del tipo impositivo de la tasa fiscal sobre juegos de envite o azar.

Eso sí, como no solo hay que ser bueno sino también parecerlo, la legislación también recoge requisitos como son una superficie mínima de 1.000 hectáreas, una inversión de 1.000 millones de euros, y la obligación de generar al menos 2.000 puestos de trabajo directos y 3.000 plazas de alojamiento hotelero. También se cita una estación de bomberos, un centro de policía, un aeropuerto, una estación de tren, un centro médico, además de una estación de tratamiento de aguas, una subestación eléctrica de alta tensión o un centro de reciclado y tratamiento de basuras. Veremos en que queda todo.