CaixaBank mirará a sus competidores para decidir si sube o no las hipotecas

CaixaBank no volverá a tener su sede central en Cataluña, al menos mientras se mantenga la incertidumbre: un paso adelante de la firma, de implantación nacional, que ha hecho bandera, sin ruido, de la cohesión nacional.

El presidente de CaixaBank, Jordi Gual, aclaró que su política comercial siempre ha sido revisar el precio de sus productos financieros, compararlos con los de los rivales y tomar las decisiones oportunas. Es decir, que con la nueva ley hipotecaria y como afirmó Gual; "hay más dinamismo en el sector y habrá que estar atento a lo que hacen los rivales", de lo que se deduce que si las hipotecas suben se adaptarán a mercado o que si bajan o se mantienen tomarán las mismas opciones.

Aunque Gual aplaudió la llegada de la nueva ley hipotecaria por la seguridad jurídica que ofrece y la mayor tranquilidad no se le escapa, como personas que lleva decenios en el sector bancario, que el actual entorno de tipos de interés negativos complica mucho los márgenes bancarios y las exigencias de los accionistas no remiten.

Más en una caja en la que siempre las cuestiones sociales han estado muy presentes, con más de 500 millones de euros destinados a esta partida, que no quieren tocar ni en una coma.

Recordó que a diferencia de otros operadores, ellos no comercian con los datos de sus clientes haciendo un uso responsable de los mismo y tienen aparejados unos costes de los que las plataformas digitales no padecen. Pues a mayor privacidad de los datos, menos ingresos.

También dijo que los reguladores suelen actuar cuando ya el daño se ha producido por lo que pidió un mayor interés por estos asuntos aunque es consciente que no es lo mismo utilizar una plataforma para reservar una casa rural que suscribir una hipoteca.

Como están presentes en un sector en el que lo importante son los vencimientos, indicó que lo importante para un banco es hacer apuestas a largo por lo que no se pueden incluir sólo objetivos financieros pues contribuyendo a la sociedad es como se consigue una auténtica rentabilidad empresarial. Algo que aplican desde su fundación en 1904.

Consciente de que la política de estímulos de Draghi en algún momento remitirá hay que prepararse para el nuevo escenario pues el actual descarta por ejemplo cualquier tipo de fusión.

La sede fuera de Cataluña

En el apartado político Gual aseguró que a día de hoy el futuro tiene todavía un alto grado de incertidumbre por lo que ve difícil que Caixa (la primera empresa de Cataluña) devuelva su sede a Barcelona.

Una decisión que se adoptó tras los trágicos sucesos de otoño de 2017 en los que se llegó a proclamar por parte del entonces presidente de la Generalitat, la independencia de Cataluña. Un banco responsable no puede tener su sede en un territorio que decida unilateralmente salir de la UE y por tanto renunciar al euro como la moneda comunitaria, se explicó por aquel entonces.