Iberdrola sigue entre los líderes de sostenibilidad a nivel global
La eléctrica que dirije Ignacio Sánchez Galán ha vuelto a ser incluida en el índice Global 100 Most Sustainable Corporations in the World, que elige a las 100 compañías más sostenibles.
El presidente de Iberdrola ha recordado en su paso por la quincuagésima edición del Foro Económico Mundial de Davos que fueron ellos quienes iniciaron el camino de la transición energética hace 20 años, habiendo invertido desde entonces 100.000 millones de euros en energías limpias, lo que les ha llevado a convertirse en un líder mundial en renovables, con 31.000 MW operativos, y a multiplicar por cinco su tamaño y resultados.
Por si esto fuera poco, Iberdrola ha acelerado sus inversiones en redes inteligentes y energías renovables hasta la cifra récord de cerca de 10.000 millones de euros anuales, pues un factor clave para el éxito del Green Deal de la UE será la electrificación, que podría propiciar que las utilities europeas duplicaran sus inversiones durante las próximas décadas.
Ignacio Sánchez Galán ha afirmado que, aunque se trata de un enorme reto, “todo el mundo saldrá beneficiado: los clientes, que tendrán un mejor servicio y más opciones donde elegir; el empleo, que aumentará y será más cualificado; los proveedores, cuya carga de trabajo se incrementará; y los accionistas, que verán crecer sus inversiones”.
En Iberdrola han acelerado el ritmo inversor en renovables y redes inteligentes hasta el doble que hace tan solo cuatro años, y el objetivo es poner en marcha otros 3.300 MW mediante energías limpias este año, que se sumarán a los 5.000 MW de 2019.
Con estos mimbres, la transición energética es perfectamente viable, dado que ya contamos con las tecnologías necesarias a un coste muy competitivo: tanto la eólica terrestre, ya madura, como la solar fotovoltaica, cuyos costes han caído alrededor de un 80% desde 2010, pasando por la eólica marina, con una caída de costes del 50%, son capaces de reemplazar hoya las fuentes de generación tradicional más contaminantes.
Asimismo, Iberdrola resalta el papel esencial que tendrán las redes eléctricas y el almacenamiento en este proceso. Galán ha hecho hincapié en la necesidad de repensar el sistema impositivo del sector energético con el fin de aplicar el principio ‘quien contamina, paga’, repartiendo de manera coherente los costes de la descarbonización entre los diferentes sectores.
La compañía continúa contribuyendo al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de la ONU, que ha integrado en su estrategia. Si bien la empresa está centrada en los objetivos 7 y 13 -energía asequible y no contaminante y acción por el clima-, contribuye directa e indirectamente al resto de objetivos.