Encerrona de Bildu a Sánchez para sacarle algo más que la Seguridad Social
Pedro Sánchez debe explicar cómo permite las transferencias de la Seguridad Social al País Vasco sin romper la caja única.
El Gobierno tendrá que explicar este martes cómo ha permitido que una de las grandes joyas del Estado, la Seguridad Social, ha pasado a manos del PNV en el País Vasco. Una cesión, materializada en forma de transferencia, que no ha sido más que la contraprestación de Sánchez a los nacionalistas tras su apoyo en la investidura.
Lo hará en el Congreso de los Diputados, en forma de patata caliente lanzada por sus socios de EH Bildu que exigen la subida de las pensiones mínimas y unas transferencias ya firmadas por la ministra, Carolina Darias, pero que ahora tendrán que explicar ante todos los grupos de la Cámara y sabiendo que tienen en contra a todos los expertos porque la medida bordearía lo constitucional.
De hecho, tal y como ya explicó ESdiario, han alertado de que entregar el régimen económico de la Seguridad Social a partir del 31 de diciembre de 2021 a los nacionalistas es una auténtica catástrofe, por más que desde el Gobierno se intente asegurar una y otra vez que "la caja única no se toca", y por tanto no hay nada que temer. De hecho, han insistido en que las afirmaciones del Ejecutivo no son ciertas, ya que no se puede trasferir una parte del sistema sin tocar el régimen económico.
Sin embargo, este debate llega al Congreso de una manera que ni el mismo Sánchez se esperaba, ya que no es una propuesta que llegue desde la oposición, que se ha colocado, en contra de esta medida sin paliativos, sino que llega de la mano de otro de sus socios EH Bildu, ya que el pasado mes de enero registraron una proposición no de ley en la que reclamaba la "transferencia inmediata" al País Vasco y a Navarra de "todas las competencias pendientes relativas a la Seguridad Social, referentes al desarrollo legislativo y la ejecución de la legislación básica del Estado y la gestión del régimen económico de la Seguridad Social".
Así pues ahora el Gobierno tendrá que retratarse ante una cuestión que ya ha negociado con el PNV, para apoyar una iniciativa de EH Bildu, que se abstuvo en la investidura y que ha llevado esta proposición al Congreso con el ánimo de garantizar la subida de todas las más bajas hasta que no haya ninguna por debajo del umbral de la pobreza, el equivalente al 60% del salario medio de los trabajadores", lo que equivaldría a "1.080 euros de pensión mínima" según la formación abertxale.
De esta manera, el presidente tendrá que explicar cómo piensa hacer frente a estas transferencias que según los propios abogados de la seguridad social podría "afectar a la propia caja única" y que debía haberse tratado en el marco del Pacto de Toledo, en lugar de hacerlo de una forma bilateral con el País Vasco, advirtiendo además de que podría entrar en conflicto con la propia Constitución.