Naturgy cierra rozando los 23 euros tras la entrada de IFM
La energética lleva un avance sostenido en la cotización desde los mínimos del año, por debajo de 16 euros, y tras la OPA de IFM por el 10,8% traslada la batalla por el control al consejo.
El resultado final de la OPA del fondo australiano IFM sobre Naturgy, que finalmente tendrá un 10,83% del capital, la mitad de la aspiración inicial del fondo, que era obtener un 22,7% del capital o al menos un porcentaje que le permitiera designar dos consejeros, ha dejado un escenario que requerirá de mucha mano izquierda por parte de los dueños de la compañía.
Si bien, se trata de una participación que le da derecho a un puesto en el consejo, en el que puede registrarse cambios adicionales: Criteria-La Caixa sopesa solicitar un representante más al haber superado el 26% del capital. Mientras, otro tema central es si se amplia el número de consejeros que actualmente asciende a 12, de los que ahora seis son dominicales (dos por CVC, dos por GIP y dos por la Criteria). Cinco son independientes y el otro puesto lo ocupa el presidente, Francisco Reynés.
Si no se eleva el número de consejeros, previsiblemente a 14, la entrada de IFM y el posible aumento de la representación de Criteria supondrían la salida de independientes, pero los estatutos internos de Naturgy señalan que en las comisiones de auditoria y nombramientos, los independientes deben tener la mitad de los puestos. Es una cuestión muy relevante. Y lo es más en la medida que el reglamento del consejo establece, asimismo, que para aprobar determinadas decisiones -inversiones elevadas y dividendos, entre otras- es necesario el apoyo de dos tercios del consejo.
En este escenario la posición de los fondos GIP y CVC es determinante. Si bien están comprometidos con IFM a respaldar su presencia equitativa en el consejo, esta cuestión en solo el principio. La entidad australiana considera que Reynés es de hecho un hombre de La Caixa, por lo que admitir un nuevo representante para esta entidad no es tan fácil. Otra posibilidad es que Reynés pase a ser presidente no ejecutivo, algo que equivale a tener que pactar un nuevo ejecutivo.
En cualquier caso, los próximos meses van a ser complejos, y, aunque los tres fondos sumen el 52% y pueden controlar el consejo, si se ponen de acuerdo en temas centrales corren el riesgo de ser obligados a lanzar una opa por el 100%.