Adif alcanza los 4.000 km tras 30 años de liderazgo en la alta velocidad
La línea de alta velocidad Madrid-Sevilla cumple 30 años, consolidando a Adif como un exponente de movilidad sostenible.
La construcción de la primera línea de alta velocidad en 1992 inició una transformación sin precedentes del ferrocarril, con la introducción de tecnologías desconocidas hasta entonces. Este proceso ha permitido a España pasar de ser importador a exportador de tecnología y know-how, que hoy aplican países de todo el mundo.
La alta velocidad fue pionera en el ámbito de la sostenibilidad, incluyendo medidas preventivas de impacto ambiental, para permitir una circulación por una red libre de emisiones de GEI (Gases de Efecto Invernadero). Todo esto ha hecho posible que en la actualidad la circulación sea de 360 trenes de alta velocidad al día.
Se han producido tres décadas de la puesta en servicio de la primera línea de alta velocidad de España, entre Madrid y Sevilla (470,5 km), la mayor obra de ingeniería ferroviaria realizada hasta ese momento en España. Esta línea experimentará ahora un proyecto de mejora, con una inversión de más de 650 millones de euros para garantizar el confort que viene prestando desde su puesta en servicio.
La puesta en servicio de esta línea supuso un enorme crecimiento de la red, que cuenta actualmente con el mayor número de km, gracias al avanzado sistema de control y mando ERTMS (más de 2.600 km), ya las inversiones acumuladas de más de 57.200 millones de euros. España es el primero en Europa y el segundo en el mundo, tras China, por kilómetros de alta velocidad operados.
En la actualidad, y tras la LAV Madrid-Galicia completada antes de finalizar 2021, se culminan las conexiones a Murcia y Burgos, así como la primera fase de la línea a Extremadura, o el nuevo túnel entre Atocha y Chamartín en Madrid, que permitirá conectar todos los corredores de alta velocidad.
Adif AV está trabajando en ampliar los beneficios del ferrocarril de alta velocidad a más territorios. Por ello, entre 2021 y 2025, prevé inversiones de más de 12.000 millones de euros en corredores y estaciones. Una apuesta que se verá reforzada por el Plan de Transformación, Recuperación y Resiliencia del Gobierno de España, dentro del mecanismo de financiación Next Generation de la UE.