La trampa de los fijos discontinuos impulsa la contratación indefinida
La presencia de contratos fijos discontinuos plantea interrogantes sobre la verdadera estabilidad laboral en España, tras un 2023 con cifras récord de contratación indefinida
Yolanda Díaz
El cierre del año 2023 en España ha sido marcado por un descenso del 1% en el paro registrado, con 27,375 personas menos en diciembre. Estos datos, publicados por el Ministerio de Trabajo, también revelan que la afiliación a la Seguridad Social ha alcanzado la cifra récord de 20,774,625 personas.
A lo largo de 2023, el mercado laboral español ha presenciado un incremento en las contrataciones indefinidas, representando un 35% del total de los contratos iniciales firmados en diciembre, con 380,730 nuevos contratos indefinidos. Aunque estos números reflejan una mejora respecto a años anteriores, se destaca una tendencia que levanta ciertas inquietudes: la proliferación de los llamados "fijos discontinuos".
Es crucial señalar que, si bien los contratos indefinidos han experimentado un aumento, la presencia de contratos fijos discontinuos ha generado una trampa laboral
La reforma laboral implementada a principios de 2022 inicialmente generó un aumento significativo en la contratación indefinida. Sin embargo, a medida que el año avanzó, se observó una estabilización en esta tendencia, indicando que los efectos de la reforma se han moderado. En diciembre, el 35% de los contratos iniciales fueron indefinidos, un ligero descenso comparado con el 40% de noviembre y el 42% de octubre.
Es crucial señalar que, si bien los contratos indefinidos han experimentado un aumento, la presencia de contratos fijos discontinuos ha generado una trampa laboral. Estos contratos, aunque se consideran indefinidos, presentan una marcada estacionalidad, siendo julio (38%), agosto (37%), y diciembre (35%) meses con porcentajes inferiores.
Expertos sugieren que, a pesar de la clasificación como indefinidos, estos contratos no ofrecen la misma seguridad que los contratos fijos tradicionales
La inestabilidad laboral vinculada a los fijos discontinuos ha sido señalada por expertos, como Fedea, cuyo informe destaca que la reforma laboral ha sido más efectiva para reducir la contratación temporal que para abordar la inestabilidad derivada de la estacionalidad del empleo en España.
El análisis de la Encuesta de Población Activa (EPA) refleja que, aunque un 61% de las personas afiliadas a la Seguridad Social en diciembre tenían contratos indefinidos, los fijos discontinuos están afectando la percepción de estabilidad laboral. Expertos sugieren que, a pesar de la clasificación como indefinidos, estos contratos no ofrecen la misma seguridad que los contratos fijos tradicionales.
No podemos pasar por alto que uno de los grandes retos que tenemos para este año es impulsar medidas que repercutan positivamente en la seguridad y estabilidad de los trabajadores
En medio de estos avances en la contratación indefinida, la atención se centra en la necesidad de medidas que no solo fomenten el aumento de empleo, sino que también aborden la verdadera seguridad y estabilidad laboral de los trabajadores.
Para Mónica Pérez, directora de Comunicación, Estudios y Relaciones Institucionales de InfoJobs, "el aumento de la contratación indefinida es, sin duda, el principal legado que deja la reforma laboral en sus dos primeros años. Habrá que ver si, a lo largo de 2024, la evolución del mercado de trabajo permite mantener esta continuidad en las contrataciones indefinidas. Asimismo, no podemos pasar por alto que uno de los grandes retos que tenemos para este año es impulsar medidas que repercutan positivamente en la seguridad y estabilidad de los trabajadores".