LA CNMC declara que en la Opa del BBVA la última palabra la tiene el Gobierno

Es muy positivo que España cuente con organismos reguladores independientes del Gobierno que sirvan para analizar operaciones sin el tamiz político. El problema surge cuando a pesar de que sus informes son contrarios o favorables por cuestiones absolutamente objetivas y bien analizadas, la última palabra la tenga siempre el Ejecutivo.

A Cani Fernández, presidenta de la CNMC, casi todas las preguntas en el curso de la Asociación de Periodistas de Información Económica celebrado en la Universidad Menéndez Pelayo de Santander, se centraron en la OPA presentada por el BBVA sobre el Sabadell.

Así lo establece la ley que sea este organismo regulador el que vele porque se cumpla la competencia, la defensa del mercado y las leyes europeas.

El problema es que en este caso y a diferencia de lo que pasó con Bankia y la Caixa es que una de las partes no quiere que siga adelante esta operación.

O mejor dicho, dos pues el Gobierno, quizá por la influencia que tienen sus socios catalanes, ha dicho desde el primer momento que se opone a esta fusión aunque estamos hablando de empresas privadas y que serían sus accionistas los que deben tomar tan importante decisión.

Tras recabar toda la información necesaria y elaborar su informe, en el caso de Bankia tardaron 8 meses, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, dará una sentencia que luego será el Ministerio quien la valide. El Ejecutivo siempre puede aducir que atenta de algún modo contra el interés general y oponerse a la operación.

Y ello a pesar de que la CNMC puede aportar en su informe soluciones o recomendaciones a algunos asuntos que puedan plantear conflicto.

Por tanto, es triste ver como el trabajo de funcionarios bien preparados y conocedores de estas materias pueden ver como se desdeña su trabajo sólo por una cuestión política.

Además de estas cuestiones, Fernández recordó que están muy alerta a los abusos del mercado para que haya siempre varios competidores que puedan ofrecer el mismo servicio a los clientes para que ellos decidan cual les gusta más.

Que en el ámbito tecnológico no se permita que los jóvenes accedan a contenidos adultos, a que los que nos ofrecen productos o servicios por internet se adecuen a las ofertas que nos hacen.

Por ejemplo, dijo Fernández, la nube sólo la operan 4 empresas y esto puede limitar mucho por lo que se debe establecer un marco legal que regule la esfera digital.

Existen ya fórmulas que permiten que los menores se identifiquen a la hora de poder comprar alcohol o acceder a contenidos inadecuados pero claro luego todo ese volumen de datos de escáner biométrico debe estar bien guardado para que no se de mal uso de ello.

También ha de controlarse plataformas que fomentan cierta adicción pues mediante cupones en Amazon hacen que la gente quede enganchada a ellos y no deseen abandonar esta aplicación.