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Pensiones

El Gobierno y los agentes sociales retoman la mesa de diálogo sobre las pensiones

El Ministerio de Seguridad Social e Inclusión y los sindicatos se reúnen para discutir pensiones, con propuestas como ampliar de 2 a 3 años la jubilación parcial y mejorar las condiciones de los relevistas

Ministra de inlcusión

Publicado por
Ariadna Chust

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El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha convocado para este lunes 29 de julio una nueva reunión de la mesa de diálogo social sobre pensiones. En un intento más de avanzar hacia un principio de acuerdo, el Gobierno ha remitido a los agentes sociales textos normativos que, lejos de ser claros y precisos, dejan mucho que desear. En la mesa se abordan cuestiones como la colaboración de las mutuas con la Seguridad Social, los coeficientes reductores en actividades penosas y peligrosas, la recuperación del coeficiente multiplicador del 1,5 para trabajadores fijos discontinuos y la compatibilidad entre trabajo y pensión.

Uno de los puntos más polémicos es la propuesta del Gobierno para ampliar de 2 a 3 años el periodo para el anticipo de la jubilación parcial. Este supuesto "esfuerzo" por mejorar las condiciones de trabajo del relevista y ofrecer un planteamiento más equilibrado y flexible para las empresas es visto con escepticismo por muchos. En particular, en la industria manufacturera, se proponen mejoras que no logran convencer a todos los sectores.

Las tensiones no han tardado en surgir. Desde la Unión General de Trabajadores (UGT) se denunció que la contrapartida para los trabajadores por el anticipo de 3 años en la jubilación parcial era una cotización acumulada de 38 años y medio, una propuesta insostenible que ha sido retirada tras fuertes críticas. Sin embargo, esto no resuelve los problemas de fondo. Bravo, secretario de Políticas Públicas y Protección Social de Comisiones Obreras (CCOO), señaló tras la última reunión que aún quedan muchos temas pendientes.

El Gobierno ahora plantea aumentar a 34 años el requisito de acceso a la jubilación parcial con contrato de relevo, en lugar de los 33 años actuales. Aunque esta modificación afecta a un número limitado de personas, Bravo destacó que la mayoría de los afectados son mujeres. "Los elementos con sesgo de género no tienen sentido", afirmó Bravo, pero lo cierto es que esta medida demuestra la falta de coherencia y previsión del Gobierno en la elaboración de sus políticas.

Otra cuestión problemática es la calidad del empleo de los relevistas, es decir, las personas que reemplazan a los jubilados parciales. El sindicato insiste en que estas personas deben tener un contrato indefinido, a tiempo completo, en un puesto de trabajo no amortizable y con una base de cotización mejorada. Este aspecto es fundamental, pero las soluciones propuestas por el Gobierno no parecen ser suficientes para garantizar la estabilidad y calidad del empleo en el contexto de la jubilación parcial.

Bravo reconoció que, aunque hay avances en algunas áreas, también persisten errores e imprecisiones en los textos normativos propuestos. Además, expresó preocupación porque algunas cuestiones que ya habían sido resueltas no se han recogido adecuadamente en los documentos. Esto podría generar más incertidumbre y complicar aún más la negociación de un acuerdo final.

El diálogo social sobre pensiones es crucial para abordar los desafíos del sistema de pensiones en España. Sin embargo, la falta de claridad y previsión por parte del Gobierno, así como su incapacidad para escuchar y actuar en consecuencia, está poniendo en riesgo el futuro del sistema. Las negociaciones actuales son un paso importante en este proceso, aunque aún queda mucho camino por recorrer para alcanzar un acuerdo satisfactorio para todas las partes.

La reunión de la mesa de diálogo social sobre pensiones de este lunes busca avanzar en la negociación de temas clave para el sistema de pensiones en España. La propuesta de ampliar el periodo de anticipo de la jubilación parcial a 3 años y la mejora de las condiciones laborales de los relevistas son algunos de los puntos más destacados. Aunque se han logrado algunos avances, persisten desafíos y preocupaciones que deberán ser abordados en futuras reuniones para alcanzar un acuerdo definitivo que beneficie a todos los trabajadores y garantice la sostenibilidad del sistema de pensiones. Pero con la falta de coherencia y visión del Gobierno.