Vivienda
La rentabilidad del alquiler en España cae por segundo mes consecutivo y se sitúa por debajo del 6%
En septiembre, la rentabilidad del alquiler ha bajado al 5,9%, reflejando una tendencia preocupante en el mercado inmobiliario.
La rentabilidad del alquiler en España ha vuelto a registrar una caída en septiembre, situándose en el 5,9%, lo que marca el segundo mes consecutivo en el que este índice se encuentra por debajo del 6%. Este dato refleja la tendencia a la baja que está experimentando el mercado de alquiler residencial, según el portal inmobiliario Pisos.com.
El precio medio de compra de una vivienda tipo de 90 metros cuadrados en España durante este periodo fue de 217.080 euros, lo que equivale a un precio de 2.412 euros por metro cuadrado. Al mismo tiempo, la renta media mensual de alquiler fue de 1.068 euros, lo que proporcionó a los propietarios un ingreso bruto anual de 12.819 euros. En términos de rentabilidad bruta, esto significa un 5,90% para los propietarios.
Comparando con el mismo periodo de 2023, donde la rentabilidad era del 6,27%, la cifra ha caído treinta y seis centésimas. Además, en comparación con agosto de 2024, se ha producido una ligera reducción de seis centésimas, ya que en dicho mes la rentabilidad fue del 5,96%. Estos descensos ponen de manifiesto un enfriamiento en el mercado de alquiler, lo que preocupa a algunos expertos.
Ferran Font, director de estudios de Pisos.com, destacó que "la rentabilidad en España ha entrado en una tendencia a la baja", señalando que esta es una situación preocupante. Según Font, el principal problema que enfrenta el sector es la falta de oferta de viviendas en alquiler, lo que, sin intervención adecuada, continuará impulsando al alza los precios de las rentas. “Si no se hace nada por mejorar la falta de oferta, los precios seguirán subiendo irremediablemente", advirtió.
Rentabilidad por capitales de provincia
El estudio de Pisos.com también ofrece una visión detallada de la rentabilidad según las principales capitales de provincia en España. La rentabilidad media más alta se encontró en Lleida, con un 7,65%, mientras que San Sebastián ocupó el último lugar con un 3,33%. Esta variación en la rentabilidad refleja las diferencias significativas en el mercado inmobiliario según la ubicación.
Las diez capitales de provincia con las rentabilidades más competitivas fueron, además de Lleida (7,65%), Zamora (7,32%), Ávila (7,17%), Teruel (7,11%), Huelva (7,09%), Castellón de la Plana (6,86%), Segovia (6,79%), Murcia (6,79%), Ciudad Real (6,78%) y Toledo (6,77%). Estas localidades ofrecen mejores condiciones de rentabilidad para los inversores en comparación con otras ciudades, lo que puede deberse a una combinación de precios de compra más bajos y alquileres relativamente altos.
Por el contrario, las capitales de provincia que registraron las rentabilidades más bajas fueron San Sebastián (3,33%), Palma de Mallorca (4,45%), Pamplona (4,51%), Madrid y Cádiz, ambas con un 4,6%, A Coruña (4,69%), Granada (4,85%), Soria (4,86%), Málaga (4,96%) y Santander (5,03%). Estas ciudades suelen tener un precio de compra más elevado, lo que reduce la rentabilidad para los propietarios, a pesar de contar con altos precios de alquiler.
Las grandes capitales: Madrid y Barcelona
En cuanto a las dos principales capitales de provincia de España, Madrid y Barcelona, los resultados fueron dispares. Madrid continuó mostrando una ligera disminución en su rentabilidad, bajando dos décimas hasta el 4,6%. Mientras tanto, Barcelona experimentó una leve mejora, subiendo diez centésimas hasta situarse en el 6,54%.
A pesar de la estabilidad relativa en estas dos grandes ciudades, los datos muestran que la rentabilidad sigue estando por debajo de lo que muchos inversores considerarían óptimo. Esto puede estar relacionado con el elevado coste de adquisición de la vivienda, especialmente en Madrid, donde los precios han crecido de manera más pronunciada en los últimos años.
El panorama general para los inversores en el mercado de alquiler en España es mixto. Por un lado, ciudades más pequeñas como Lleida, Zamora o Ávila siguen ofreciendo buenas oportunidades de rentabilidad. Por otro, las grandes ciudades como Madrid, Palma de Mallorca y San Sebastián presentan retos debido a la elevada demanda y los altos precios de compra, lo que limita la rentabilidad de los propietarios.
A corto y medio plazo, la oferta limitada de viviendas en alquiler continuará siendo un factor clave que influirá en los precios y la rentabilidad del sector. Sin una política que fomente la construcción de nuevas viviendas o la liberalización de espacios para alquilar, es probable que los precios sigan subiendo, afectando tanto a los inquilinos como a los inversores.
Ferran Font concluyó que, aunque el mercado sigue mostrando señales de fortaleza en algunas áreas, la tendencia general es de estabilización a la baja. Si las condiciones actuales persisten, los inversores deberán ajustar sus expectativas y estrategias para maximizar su rentabilidad en un entorno cada vez más competitivo.