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El próximo 21 de octubre se celebra el día mundial del Ahorro Energético 

Cinco mitos sobre el ahorro energético en el hogar

Es esencial que todos pongamos de nuestra parte para adoptar hábitos más responsables con el medio ambiente. Conocer y desmentir estos mitos es un paso clave hacia un uso más eficiente de los electrodomésticos, y con ello, un ahorro tangible en el consumo de energía que repercute en el bienestar de nuestro planeta. 

(Foto de ARCHIVO) Por toda España se han celebrado diferentes foros para concienciar sobre el ahorro energético.AYUNTAMIENTO DE RINCÓN DE LA VICTORIA

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El próximo 21 de octubre se celebra el Día Mundial del Ahorro Energético, una fecha clave para concienciar a la sociedad sobre la importancia del uso eficiente de la energía en nuestro día a día. 

Con motivo de este acontecimiento, Beko, la marca de electrodomésticos líder en Europa, se suma a la iniciativa desmintiendo algunos de los mitos más comunes sobre el consumo de energía en el hogar. Estos mitos, muchas veces aceptados como verdad, pueden interferir en nuestra voluntad de ahorrar energía. 

Mito 1: Lavar con agua fría no es efectivo 

Realidad: Con los avances en detergentes y la mejora de los electrodomésticos, lavar con agua fría es tan eficaz como hacerlo con agua caliente en la mayoría de las prendas. Lavar en frío, no solo ayuda a proteger los tejidos, sino que también reduce significativamente el consumo energético. 

Mito 2: Los ciclos de secado rápido de las secadoras ahorran más energía 

Realidad: Aunque los ciclos rápidos pueden parecer una opción eficiente, lo cierto es que su corta duración no siempre se traduce en menor consumo energético. Para secar la ropa en menos tiempo, estos programas exigen un mayor esfuerzo del electrodoméstico, lo que incremente el gasto energético. Por el contrario, el modo ECO de las secadoras es más largo pero más eficiente, ya que distribuye el uso de energía de manera más equilibrada a lo largo del ciclo, evitando picos de consumo. Para un mayor ahorro, las secadoras con tecnología de bomba de calor son la opción ideal, ya que reutilizan el calor generado, logrando reducir el consumo energético hasta un 50%, sin afectar la calidad del secado.

Mito 3: Lavar los platos a mano consume menos agua y energía que usar un lavavajillas 

Realidad: Este es uno de los mitos más comunes, pero está lejos de la realidad. Lavar platos a mano puede llegar a consumir hasta 5 veces más agua que un lavavajillas moderno. Gracias a tecnologías como SaveWater, integrada en los lavavajillas Beko, el agua del último aclarado se almacena de forma totalmente higiénica para reutilizarla en el siguiente ciclo de lavado. Esto permite reducir el uso de agua de 9,5 litros a 6,9 litros por ciclo, haciendo del lavavajillas una opción más sostenible tanto en términos de agua como de energía.

Mito 4: El horno debe estar siempre precalentado 

Realidad: Aunque el precalentamiento del horno es necesario en algunas recetas, no es imprescindible en todas las ocasiones, especialmente en aquellas preparaciones que requieren más de una hora de cocción. Además, es importante evitar abrir el horno durante la cocción de los alimentos, ya que al hacerlo se pierde al menos un 20% del calor acumulado, lo que obliga al horno a consumir más energía para recuperar la temperatura ideal. Un uso más consciente del horno puede marcar la diferencia en el ahorro de energía a largo plazo.

Mito 5: Tener más alimentos en el frigorífico aumenta su consumo energético 

Realidad: La creencia de que un frigorífico lleno consume más energía es errónea. En realidad, cuanto más lleno esté el frigorífico, más eficiente es su funcionamiento. Esto se debe a que los alimentos ayudan a mantener la temperatura interna, actuando como una barrera que limita la entrada de aire caliente cada vez que se abre la puerta. Cuando el frigorífico está vacío, se permite la entrada de una mayor cantidad de aire cálido, lo que obliga al electrodoméstico a trabajar más y, por lo tanto, a consumir más energía. Mantener el frigorífico adecuadamente lleno es una estrategia eficaz para optimizar su rendimiento energético.