Dos de cada tres autónomos siguen facturando a mano

El 69% de los autónomos y el 45% de las micropymes siguen facturando a mano, con lo que supone en términos de pérdida de tiempo y errores, e impacto sobre la productividad, tal y como se desprende del informe que acaba de publicar TeamSystem – compañía tecnológica líder en el desarrollo de soluciones digitales para la gestión de empresas y profesionales – y que diagnostica por primera vez en España la situación de gestorías, trabajadores por cuenta propia, pymes y micropymes ante la llegada inminente de la Factura Electrónica Obligatoria.

En este contexto, TeamSystem alerta de que ya no hay vuelta atrás pues empeñarse en llevar los procesos de facturación y contabilidad de forma manual acarreará un incumplimiento normativo a partir del año que viene, es decir, en cuanto entren en vigor la Ley Antifraude y la Ley Crea Crece. 

Precisamente el BOE acaba de publicar hace apenas unos días la orden ministerial que complementa el primer reglamento.

Asimismo, la compañía estima que emitir facturas con papel, boli y tablas de excel conlleva tiempo y errores que generan pérdidas superiores a los 3.600 millones de euros al año para los autónomos y avisa de que es una más de las causas de que este colectivo se encuentre a la cola de la productividad en la Unión Europea.

Aun así, advierte de que 9 de cada 10 negocios desconocen la nueva legislación que afectará a su actividad diaria, un marco legal que genera dudas y desconcierto entre pymes y autónomos, pero también entre las gestorías, que canalizan las facturas de 3 de cada 10 negocios. La preocupación es aún más acuciante en las empresas donde la facturación recae en una única persona. De hecho, 3 de cada 4 negocios con más de un empleado concentran la emisión de sus facturas en un solo empleado.

El 30% de los negocios ven más inconvenientes que ventajas 

En este informe – elaborado en colaboración con Materia Prima tras consultar con 1.200 autónomos, micropymes y asesorías en nuestro país – se recoge que casi el 30% de los negocios ven en el nuevo marco legal más inconvenientes que ventajas, pues temen un aumento de la carga de trabajo y de los gastos, así como una invasión de su privacidad. En esta línea, casi la mitad de los negocios albergan serias dudas sobre los beneficios de la nueva normativa, a pesar de que estas opiniones difieren sustancialmente en función del grado de digitalización.

Adaptación a las nuevas obligaciones 

En términos de adaptación, la mitad de los negocios considera que tendrá que hacer un esfuerzo significativo para adaptarse a la nueva ley, mientras que la otra mitad cree que se adaptará sin dificultad. En este punto, casi 4 de cada 10 negocios esperará hasta que la facturación electrónica sea obligatoria mientras que apenas un 15,4% lo hará en cuanto tenga conocimiento de la medida.

Pues bien, para adaptarse a la norma, casi siempre la opción preferida es apoyarse en Hacienda y en su solución gratuita, aunque en el caso de las empresas que ya cuentan con un software de gestión, 4 de cada 10 continuarán con él si se adapta a la ley. Por el contrario, los que descartan tener a Hacienda como aliado en su facturación electrónica esgrimen cierta desconfianza, funcionalidad y compatibilidad hacia su plataforma.

Plan de acción política 

TeamSystem trasladará a los ministerios de Economía, Hacienda y Transformación Digital las principales conclusiones de este informe para concienciar de la precariedad digital de pymes y autónomos y promover de manera real su transformación, máxime en un momento óptimo por la recepción de fondos europeos y la campaña del kit digital.

Por su parte, Marcos de la Cueva, CEO de Billin, comenta que «todos los barómetros señalan un incremento de la carga burocrática y contable para los autónomos, lo que conlleva más trabajo y les puede abocar a cometer más errores. Estamos ante una oportunidad de oro para acelerar estos procesos de digitalización, pero se necesita un acompañamiento y asesoramiento profesionalizado para aprovechar las ayudas disponibles y lograr que las pymes y autónomos de España dejen de ser de las menos productivas de la Unión Europea. La implantación de la factura electrónica es, sin duda, clave para el crecimiento y la competitividad de las empresas.»