Josep Escandell acaba de ser nombrado presidente
La Federación Española de Caza quiere que su sector esté mucho más presente en la sociedad española
Escandell, que es valenciano, ha alertado del peligro que supone cuando los políticos se meten a legislar cuestiones que deben organizar los técnicos.
Josep Escandell, flamante presidente de la federación de caza ha querido compartir con Esdiario su proyecto durante los próximos cuatro años.
El valenciano espera estar a la altura de las exigencias de los cazadores españoles en unos momentos adversos, con un Gobierno junto a sus socios y unas autoridades en Bruselas, que no están precisamente a favor de la cultura cinegética.
De hecho, comentó con un clara segunda intención cómo se pueden incurrir en errores garrafales cuando los políticos se meten a legislar en cuestiones sin escuchar la parte técnica.
Por ello, Escandell priorizará mejorar la imagen de la caza ante la sociedad y que todos los cazadores españoles se sientan representados en la Real Federación Española de Caza (RFEC) como principales objetivos durante su mandato al frente de la entidad que acaba de comenzar.
Escandell entiende que cambiar la imagen de la sociedad sobre la caza “redundaría en políticas más favorables, y estas en normativas racionales y propicias para el sector, un cambio de contexto que además propiciaría la incorporación de nuevas generaciones de cazadores”.
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Ingeniero de montes, con un máster en gestión cinegética, y tras más de siete años dirigiendo con notable éxito la Escuela de Caza de la Federación de Caza de la Comunidad Valenciana (FCCV), ha destacado que apostará por el modelo aplicado en la FCCV, basado en la proactividad, en escuchar a la gente y en el contacto directo con el cazador de a pie.
Su propuesta recoge las necesidades manifestadas por todas las federaciones autonómicas de caza, y potenciará la asamblea y el comité interautonómico como herramientas de fiscalización y de toma de decisiones, priorizando la participación, la transparencia y el autogobierno.
Revitalizar la competición, otro de los objetivos
La competición, ha detallado, se encuentra inmersa en “una crisis de credibilidad, percibida por todos los estamentos, desde la base de federados hasta los órganos directivos autonómicos. Los factores son múltiples y complejos, pero todos acarrean como resultado el deterioro de la imagen de la federación”.
En este escenario, abogará por revitalizar el mundo de la competición, “reforzando sus interacciones con la caza social y generando los canales de conexión entre lo que constituyen las dos caras de una misma moneda. Una reforma integral exige de una diagnosis profunda, y de la participación de todos los agentes y actores implicados, desde los deportistas de alto nivel hasta la base de federados. Desde los jueces y árbitros hasta los órganos directivos”, ha concluido.
Conviene no olvidar, aunque le pese al Gobierno, que la federación española de Caza es la tercera de nuestro país por número de federados y debe estar mucho más presente en la sociedad española, comentaron desde la RFEC.