Caza de brujas en Podemos: Iglesias busca la mano negra que ha tumbado a Espinar
El conocido ya como "caso Espinar" tiene una derivada interna en Podemos donde se ha desatado una cruenta guerra de sables en busca del "autor intelectual" de la filtración sobre el senador.
Venticuatro horas después de la publicación de los tejemanejes inmobiliarios del portavoz de Podemos en el Senado, Ramón Espinar, y apagados ya los ecos de la exagerada pataleta de los dirigentes morados contra el medio de comunicación que publicó la noticia, el Grupo Prisa, en el partido de Pablo Iglesias se ha abierto este jueves un nuevo capítulo sobre el escándalo, que afecta de lleno a la guerra interna que enfrenta a dos importantes sectores por el control del partido en la Comunidad de Madrid.
El portavoz de Podemos en la Asamblea de Madrid, José Manuel López, considera que el chanchullo inmobiliario de su compañero de bancada en el parlamento regional "perjudica mucho" al proyecto de su partido. La portavoz municipal, Rita Maestre, elude valorar el asunto aferrándose a su cargo institucional en el Ayuntamiento. Y el número dos de Podemos, Iñigo Errejón, guarda un estrepitoso silencio.
Junto a Tania Sánchez, López y Maestre son aliados en Proceso Adelante, la candidatura diseñada por el errejonismo para conquistar el poder en Podemos Madrid.
A la misma hora, Pablo Iglesias sostenía la tesis contraria. La información sobre la venta de la vivienda VPO de Espinar "fortalece" a Podemos y busca tan sólo debilitar su propio liderazgo. En la misma línea se expresó su aliada en el Grupo Parlamentario, Irene Montero. Para ambos, tras la difusión de la noticia se encuentra una conspiración encabezada por el presidente del Grupo Prisa, Juan Luis Cebrián.
Busca y captura: se persigue al filtrador
Pero más allá de las justificaciones públicas, según ha sabido ESdiario, en el sector que lidera Iglesias y en el que milita Espinar se ha desatado una caza de brujas en toda regla en busca del ideólogo de lo que el líder morado considera un ataque dirigido contra su propia persona.
"Evidentemente hay grupos de poder que tienen un interés en que determinadas facciones ganen dentro de Podemos, claro que sí, que hay grupos de poder que tienen interés en que ganen unos y no otros, y ahora atacan a Ramón porque han decidido que es mi candidato", ha afirmado este jueves.
Lo cierto es que Espinar e Iglesias sabían que la información sobre el polémico senador circulaba desde hace un par de semanas por algunas redacciones. El entorno del afectado recuerda que el expediente de la compraventa de su vivienda se encontraba en dependencias de la Comunidad de Madrid.
Todo ello, con la historia completa de una operación legal pero éticamente discutible según los propios estándares de Podemos, acabó en la redacción de la Cadena SER y ha sido difundida en el momento más delicado para el duo Iglesias-Espinar: su candidatura ha sufrido la pasada semana una primera e importante derrota a manos de sus rivales.
Por eso, el caso Espinar se ha convertido en la última munición de una batalla sorda pero cruel. Iglesias busca ahora al ideólogo de esta última escaramuza.