Ni los adivinos se atreven con el Gordo de la Lotería
Nadie sabe dónde puede caer el Gordo de Navidad, pero los décimos ya están a la venta, y la campaña que este año ha presentado SELAE recurre a los videntes para convencernos de comprar.
Nadie sabe dónde puede caer el Gordo de Navidad, pero los décimos ya están a la venta, y la campaña que este año ha presentado SELAE recurre a los videntes para convencernos de comprar.
Parece que la gran bronca entre la colaboradora y el rey del cortijo que terminó con ella fuera de "Sálvame" se ha dado la vuelta y de qué manera para el todopoderoso presentador.
A pesar de que es muy aficionada a compartir casi todo de su vida en sus redes sociales intenta por todos medios mantener alejadas cosas que al final acaban saliendo de una forma u otra.
Cuando los audímetros aprietan ni a las leyendas de la tele se respeta... Y si no que le pregunten a la matriarca del Clan Campos que ya no gana para disgustos con sus compañeros.
Iniciaron su relación dentro de la casa de Guadalix y la consolidaron fuera con boda y descendencia incluidas, pero todo acabó mal entre rumores de terceras personas. Quién iba a decir quién
La dirigente de Vox fue invitada al mismo programa de RTVE que tuvo de estrella a Otegi, pero al enterarse se negó a acudir al sentirse utilizada para blanquear al batasuno.
El doctor Jesús Candel fue el azote de la sociedad civil contra el caos de la expresidenta andaluza en la gestión de la sanidad pública. Ahora, dirimen en los tribunales sus diferencias.
Javier Rodríguez
Bildu es Otegi, y Otegi nació, creció y mandó con Batasuna y ETA, el entramado que dejó casi 900 muertos. Rehabilitado ahora por RTVE y apoyo de Sánchez, la hemeroteca no engaña.
Se puso a la cabeza de la manifestación contra la sentencia y luego sacó pecho de la correción del Supremo. ¿Por qué calla ahora el partido morado con este brutal caso reciente?
En la marabunta de análisis políticos sobre los pactos y no pactos que se avecinan una idea alarmante cobra cuerpo entre los electores de dos partidos que no tienen nada que perder... o sí.
EDITORIAL
Sánchez lleva un año apoyándose en la nueva Batasuna y ha coronado esa vergüenza utilizando al ente público para blanquear a un terrorista que sigue sin condenar a ETA.