El viudo de la diputada asesinada conmociona a sus compatriotas con una foto
Madre de dos hijos pequeños y con una larga trayectoria dedicada a ayudar a los demás a través de ONGs, la cruenta muerte de Jo Cox ha sumido en la desolación a sus compatriotas.
"Hemos perdido a una gran estrella. Era una diputada comprometida y solidaria. Mis pensamientos están con su marido Brendan y sus dos hijos pequeños", aseguró el primer ministro británico David Cameron en su Twitter al confirmarse la fatal noticia del asesinato de la diputada laborista Jo Cox, tras haber sido apuñalada y tiroteada a plena luz del día en la localidad inglesa de Birstal, cerca de Leeds.
Aunque todavía no se han confirmado las motivaciones políticas de su cruento asesinato, el agresor fue identificado como Thomas Mair, vecino de la localidad de 52 años, y varios testigos aseguran que gritó "¡Gran Bretaña, primero!" en el momento de cometer la agresión.
Por las redes circula no sólo una imagen del momento de su detención, sino otra fotografía del agresor detenido por la policía en la que viste una chaqueta militar con unos vaqueros y unas guantes rojos.
Los medios británicos aseguran que Mair tenía problemas mentales y estaba interesado en grupos supremacistas blancos, sin que por el momento se conozca el motivo por el que atacó a la parlamentaria. El hermano de Mair, Scott, ha relatado que éste tenía "una historia de enfermedad mental" pero había recibido "ayuda". "Todavía me cuesta creer lo que ha ocurrido. Mi hermano no es violento y no es para nada político", ha afirmado, según publica este viernes The Telegraph.
Los vecinos también han contado al diario que Mair, de 52 años, vivía solo desde hacía 20 años, cuando murió su abuela, y aparentemente nunca había tenido un empleo a jornada completa. Asimismo, habría comentado que había recibido "psicoterapia y medicación".
Según el Telegraph, Mair, que nació en Escocia pero residía en Birstall, cerca de Leeds, desde hacía décadas, estaba suscrito a S.A. Patriot, una revista sudafricana publicada por White Rhino Club, una organización partidaria del apartheid.
Por su parte, el Souther Poverty Law Center, una organización estadounidense dedicada a combatir el odio, ha informado de que Mair era un comprometido partidario de la Alianza Nacional (NA), una organización neonazi estadounidense.
Europa, conmocionada con el asesinato
Sea como fuere Europa entera está conmocionada con el suceso y las instituciones y líderes de la UE mostraron su consternación por el asesinato de la diputada británica al tiempo que el Eurogrupo guardaba un minuto de silencio en su memoria.
El crimen ha sacudido especialmente al Partido Laborista, cuyo líder ha lamentado en un comunicado un "horrible asesinato" que ha "impactado" a "todo el país". Jeremy Corbyn ha recordado la vida de "servicio público" de Cox y su "profundo compromiso con la humanidad", que le llevó a trabajar para la ONG Oxfam.
De hecho, estaba con Brendan Cox, un antiguo ejecutivo de la organización Save the Children y era asesor de Gordon Brown, según el diario británico The Guardian.
Precisamente marido de la diputada, consiguió conmover a todos los británicos al apelar a "la unidad para combatir el odio que la mató". "El odio no entiende de credos, razas o religiones, es venenoso", lamentó Brendan Cox en un comunicado.
El viudo recordó a su difunta mujer como una persona que "creyó en un mundo mejor y luchó por él cada día". "Vivió cada día como si fuera el último", destacó en su texto, del que se han hecho eco los medios británicos.
Con la muerte de la diputada, añadió su viudo, "comienza un nuevo capítulo" en la vida de la familia, "más difícil, más doloroso, menos feliz, menos lleno de amor".
"Ella habría querido por encima de todo que ahora ocurriesen dos cosas: una, que nuestros preciosos hijos sean colmados de amor y dos, que todos nos unamos para luchar contra el odio que la mató", reclamó Brendan Cox, que también difundió una tierna imagen de su mujer en Twitter.