Melania Trump incendia la campaña en EE.UU. con unas picantes fotos de su pasado

La polémica persigue a la esposa del candidato republicano a la presidencia de los Estados Unidos, Donald Trump. Si hace un par de semanas fue el discurso plagiado a Michel Obama en 2008 lo que puso al matrimonio en el ojo del huracán, esta vez el escándalo tiene un tiente erótico con el que va a ser complicado lidiar.

El diario New York Post publicó el pasado fin de semana unas instantáneas de la que pudiera ser Primera Dama norteamericana completamente desnuda en la portada de una revista francesa allá por 1995. Las imágenes corresponden a una sesión de fotos inédita que realizó el fotógrafo francés Alé de Bassevilla en Manhattan y que salieron a la luz en la edición de enero de la revista masculina Max, actualmente desaparecida.

La sesión tuvo lugar poco después de que la modelo eslovena de 25 años, Melania K, como se hacía llamar por aquel entonces, llegara a la Gran Manzana donde tres años más tarde conoció a su actual esposo en una fiesta en la Semana de la Moda de Nueva York.

"Era una foto para una revista europea antes de conocerla. Y en Europa, este tipo de imágenes estaban de moda y eran comunes", se excusó el candidato a la Casa Blanca, Donald Trump, que recordó que Melania era "una modelo exitosa" y que hacía fotos para muchas revistas, incluidas las portadas de las grandes". Pero para los votantes republicanos más conservadores estas explicaciones no son suficientes. Ver a su futura Primera Dama de esta guisa en la portada de una publicación es un insulto a sus principios.

No en vano, algunos asesores del candidato como Jason Miller han salido al paso de este revés alegando que la aspirante a Primera Dama "no tiene nada de lo que avergonzarse" porque el hecho de que sea "una mujer bonita" permite que las fotos sean "una celebración del cuerpo humano como arte".