Trump aterroriza a Hillary Clinton con una frase que ha inquietado a medio mundo
Más allá de su polémica relación con las mujeres, que no ayudó mucho a suavizar con un "asquerosa" en mitad del tercer debate cara a cara, el magnate americano logró preocupar al respetable.
El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, se ha abstenido este miércoles de confirmar si aceptará el resultado de las elecciones a la Presidencia de Estados Unidos, que se celebran el próximo 8 de noviembre, comicios que apuntan a la victoria de su rival, la demócrata Clinton, según los últimos sondeos.
"Ya lo veré cuando llegue el momento", ha señalado Trump, al hablar sobre lo que el republicano cree que son unas elecciones amañadas en su contra. "Te mantendré en suspenso", ha señalado.
Las Vegas fue el escenario del tercer y último debate entre los dos candidatos a suceder a Barack Obama, en un momento en el que las encuestas muestran la caída de apoyo del magnate multimillonario, envuelto en una serie de polémicas por sus declaraciones sobre las mujeres, afirmaciones que han vuelto a colocar el machismo de Trump en el centro del debate.
Tras las palabras de Trump, negándose a reconocer si aceptará los resultados de los comicios, Clinton ha señalado que lo que en realidad está haciendo es "denigrando" la democracia estadounidense.
"Me siento aterrada de que alguien que está nominado por uno de los dos grandes partidos (a la Casa Blanca) tome esta posición", ha afirmado.
Durante el último debate ambos discutieron sobre diferentes aspectos, entre ellos la deuda nacional --que en 2015 representa el 105 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB)--, la filtración de correos de WikiLeaks, la situación en Siria y la inmigración, la Segunda Enmienda y el derecho a la tenencia de armas, Rusia o la polémica sobre las acusaciones por agresión sexual contra Trump.
En este sentido, Trump insistió en que la publicación de diferentes declaraciones de mujeres que aseguran que fueron víctimas de actitudes inapropiadas durante los últimos años por el ahora candidato a la presidencia es una estrategia de Clinton para desacreditarlo de cara a las elecciones. Todo ello instantes antes de que el magnate interrumpiera una intervención de su rival para espetar un "qué mujer tan asquerosa".
Otro de los aspectos que destacaron del debate fueron las declaraciones sobre la relación entre el republicano y el presidente de Rusia, Vladimir Putin. Clinton calificó a Trump como una "marioneta" del ruso, y le pidió que condene lo que ha definido como un intento por parte de Moscú de utilizar los ciberataques para influir en favor del republicano de cara a las elecciones.
Sin embargo, el magnate aseguró que Putin no tiene respeto "ni por Clinton ni por el presidente, Barack Obama", sugiriendo que él sería mejor opción para alcanzar la Presidencia.
En el último debate presidencial de cara al 8 de noviembre, ambos abordaronla cuestión sobre la posesión de armas y Trump criticó que, en caso de ganar Clinton, la Segunda Enmienda de la Constitución estadounidense "será una réplica muy, muy pequeña de lo que se tiene ahora".
En cuanto a la inmigración, Clinton reconoció que los delincuentes violentos sí deben ser deportados del país, pero aprovechó la situación para traer a colación la reunión entre Trump y el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, burlándose de su actuación. En este sentido, la ex secretaria de Estado ha asegurado que Trump se quedó mudo en el encuentro, después de haber defendido a capa y espada su propuesta de levantar un muro entre Estados Unidos y México.
Con este panorama, Clinton fue la ganadora del último debate según un sondeo publicado por la cadena de televisión estadounidense CNN poco después del final del mismo.
El sondeo apunta que el 52% de los espectadores consideran que Clinton se impuso en el debate, por el 39% que creen que el vencedor fue Trump.