Maduro tiembla, no se fía y suplica al Ejército venezolano: "Nervios de acero"
El dictador intenta el cierre de filas de todos sus generales y recurre de nuevo a sus seguidores para agitar las calles contra la oposición.
Nicolás Maduro no se fía e intenta contener daños tras el golpe maestro dado este martes por Juan Guaidó. El dictador ha instado a actuar con "nervios de acero" frente al llamamiento lanzado por el presidente encargado y jefe de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, y ha asegurado que cuenta con la "lealtad" de los principales comandantes de las Fuerzas Armadas.
Maduro ha asegurado que ha conversado con los comandantes de todas las Regiones de Defensa Integral (Redi) y de las Zonas de Defensa Integral (Zodi), que han manifestado "su total lealtad al pueblo, a la Constitución y a la patria".
"Llamo a la máxima movilización popular para asegurar la victoria de la Paz. ¡Venceremos!", ha proclamado en su primer mensaje tras el desafío lanzado este martes a primera hora por Guaidó, que dijo contar con el apoyo de parte de las Fuerzas Armadas.
Guaidó se autoproclamó presidente encargado en enero y, desde el principio, ha llamado a las Fuerzas Armadas a unirse a su causa. Según ha explicado este martes junto a la base La Carlota, a las afueras de Caracas, cuenta con el apoyo de "un grupo muy importante" de militares en todo el país, gracias a los cuales habría sido liberado el también opositor Leopoldo López.
El Gobierno, entretanto, ha asegurado que hay normalidad en los cuarteles y habla solo de un grupo reducido de "traidores". Al igual que Maduro, otros líderes han llamado a los seguidores chavistas a concentrarse en las calles de todo el país y ante el Palacio de Miraflores.