El segundo fiasco de Broncano en TVE tiene primeras consecuencias para Moncloa
Las primeras iniciativas parlamentarias llegan al Congreso tras el fallido fichaje del humorista. Y Sumar busca arrimar el ascua a su sardina y se desmarca del PSOE.
Apenas unas horas después del nuevo fiasco en el Consejo de Administración de RTVE, llegan al Congreso las primeras iniciviativas parlamentarias sobre el fallido fichaje de David Broncano que con tanto ahínco busca Moncloa.
Así, Sumar ha preguntado al Gobierno las medidas que prevé para limitar la externalización de la producción audiovisual en la corporación RTVE, en medio del revuelo tras posponer otra vez su Consejo de Administración la decisión sobre la posible incorporación del programa La Resistencia.
Así lo han trasladado los diputados de partido de Yolanda Díaz, Francisco Sierra y Enrique Santiago (portavoz parlamentario de IU) mediante una batería de preguntas parlamentarias regiastradas este jueves en el Congreso.
Los dos parlamentarios aluden a que durante estos días ha transcedido el debate en el seno del Consejo de Administración de RTVE sobre los modelos adecuados en su seno para la contratación de programas, ante la práctica "generalizada" de externalización y subcontratación de servicios en la televisión pública con productoras privadas.
Así, tanto Sierra como Santiago exponen que ello se sucede a pesar de que RTVE cuanta con platós, equipos técnicos de última generación y una "extensa plantilla" de empleados con altas cualificaciones, que "perfectamente pueden realizar tareas" que en el modelo de externalización realizan trabajadores de "empresas privadas con peores condiciones laborales".
Aprovechando la reunión del Consejo de Administración de RTVE de este jueves, los dos diputados de Sumar aluden a que entre los puntos a tratar de encuentra un "nuevo modelo de contrato en coproducción de programas de TVE".
Brecha entre los socios
En este sentido, explican que versa sobre un sistema que establezca la utilización de equipos técnicos y empleados del ente público, incluso en los casos en los que se contrate con una productora privada. El objetivo radica, según relatan, en reducir así la actuación y facturación de empresas externas al "mínimo imprescindible incluso cuando sea exigencia de estrellas televisivas".
A su vez, señalan que este tipo de contratos con empresas externas no debe superar el año de duración como máximo, sujetos a posterior renovación en base a medición de audiencias para garantizar un gasto "justificado por la calidad del producto".
"Creemos que este tipo de medidas tendentes a incrementar la producción propia de RTVE, o en todo caso la corproducción para reducir el alcance de la externalización o subcontratación de servicios audiovisuales, así como la propia limitación de contratos con productoras externas y el condicionamiento de su renovación a resultados de audiencia redunda en la reducción de los precios adquiridos y contratos por RTVE, lo que reduce el gasto público y garantiza el empleo de los profesionales de RTVE", argumentan ambos diputados.