Volvo XC60, cuando el pez chico se come al grande

El XC60 es el pilar sobre el que se ha asentado la nueva Volvo. Este SUV, que ahora estrena la segunda generación (aunque la primera tuviera un restyling en 2013 a mitad de su ciclo de vida), es un modelo clave para la marca, pues no solo es su coche más vendido con más de 1 millón de unidades entregadas los últimos 9 años, también es el SUV premium más solicitado en Europa, y eso cuando te enfrentas a rivales de la talla del Audi Q5, el Mercedes GLC o el BMW X3 es mucho decir. Estos modelos se habían puesto al día con las últimas novedades (bueno el BMW está por llegar) y se hacia necesaria una actualización completa en el de la firma sueca. Tras recorrer los primeros kilómetros a sus mandos no tenemos duda de que va a ser un éxito.

Basado en la nueva plataforma SPA que le hace crecer 10cm y es la misma que utiliza el XC90 (que por cierto tiene razones para pensar que va a perder compradores que se decanten por su hermano, más proporcionado y con más tecnología aún), la gama de motores de 4 cilindros resulta potente y eficiente a partes iguales para satisfacer a todo tipo de consumidores, si bien es verdad que de momento solo a los de buen poder adquisitivo, ya que las versiones de tracción total y cambio automático son las únicas disponibles. A lo largo del año llegarán las versiones manuales y a principios de 2018 las de tracción delantera, siendo la primavera del año que viene el momento clave con la llegada de la versión de acceso D3, manual y FWD, que pondrá el listón de salida del precio en los 39.950€ de tarifa.

En las variantes de gasolina están el T5 y el T6, con 254 y 320CV respectivamente, y en las diésel, el D4 y el D5 con 190 y 230CV. El tope de la gama es el híbrido enchufable T8, que ofrece 407CV de potencia y una autonomía 100% eléctrica de 45 kilómetros. Hemos probado las versiones de gasolina más potentes ante la creciente gasolinización del mercado y resultan muy satisfactorias, especialmente el T8. Su suavidad es total y la entrada del modo eléctrico es pura suavidad mientras que se siente la fuerza en todo momento. Eso sí, está todo tan bien filtrado que a veces resulta difícil encontrar las sensaciones que semejante potencia debería transmitir. El T6 por su parte cubre muy bien el posicionamiento sport, aunque se echa en falta algo más de sonido y ambiente deportivo en el habitáculo. Todo por el diseño, que por cierto no tiene rival.

Pero de lo mejor del Volvo XC60 llega desde el apartado de la seguridad, un aspecto en el que la marca es un referente y que en este modelo se refuerza con el estreno de tres innovadores sistemas que van a convertir a al nuevo SUV de Volvo en el más seguro del mundo: el BLIS –sistema que vigila los ángulos ciegos– con asistente de dirección; el City Safety con esquiva asistida y el sistema de Atenuación de colisiones con un vehículo en el carril contrario. Con todo ello Volvo estima vender 500 unidades del XC60 en 2017, pero la cifra de referencia para un año completo con todas las versiones de la gama disponibles son los 5.000 coches que estaba entregando de la generación saliente. Los precios ahora arrancan en 51.190 euros y llegan hasta los 76.283 del T8 más equipado.