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La UE endurecerá las normas sobre homologación de vehículos y emisiones

La Unión Europea endurecerá a partir de septiembre de 2020 las normas comunitarias sobre homologación de vehículos y control de emisiones para evitar nuevos escándalos como el dieselgate

Foto Flotas Arval

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Juan Luis Omeñaca

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La Unión Europea endurecerá a partir de septiembre de 2020 las normas comunitarias sobre homologación de vehículos y control de emisiones ya que las irregularidades descubiertas en relación con el uso de dispositivos de desactivación ilegales por determinados fabricantes de automóviles, como el fraude de manipulación de emisiones de Volkswagen encontrado en 2015, han concienciado a la opinión pública, las autoridades y los operadores económicos de la necesidad de aplicar sólidas disposiciones en materia de homologación, así como de mejorar los métodos de ensayo en relación con las emisiones de contaminantes procedentes de los vehículos, con objeto de evitar casos similares en el futuro.

Así, los Veintiocho países de la Unión Europea han adoptado de manera formal, tras el acuerdo con la Eurocámara del 7 de diciembre de 2017 al que llegaron los países miembros, las nuevas normas que refuerzan la independencia y "evitan conflictos de intereses" de las autoridades encargadas de los controles y los organismos de supervisión del mercado.

La aplicación armonizada de las normas en toda la UE reducirá las diferencias en su interpretación y aplicación por parte de las autoridades nacionales de homologación y de los servicios técnicos.

Cada país deberá un número mínimo de comprobaciones de vehículos al año. Este número mínimo de comprobaciones será de 1 de cada 40 000 vehículos de motor nuevos matriculados en dicho país el año anterior. Para los países con un reducido número de matriculaciones de automóviles habrá que realizar un mínimo de 5 ensayos. Al menos un 20 % de las comprobaciones deberán ser ensayos relacionados con las emisiones, con verificación de las emisiones en condiciones reales de conducción.

Los países que dispongan de menos capacidades técnicas para efectuar los ensayos requeridos podrán ponerse de acuerdo con otros países para que realicen los ensayos en su nombre.

El Reglamento establece la obligación de que los Estados miembros financien las actividades de vigilancia del mercado. Las tasas correspondientes a las actividades de homologación se cobrarán a los fabricantes que hayan solicitado dicha homologación. La Unión Europea realizará evaluaciones periódicas de las autoridades nacionales de homologación.

Su finalidad es conseguir un nivel elevado de seguridad y de eficiencia medioambiental de los vehículos de motor y solventar las principales deficiencias detectadas en el actual sistema de homologación

Además, el nuevo sistema hará posible detectar con prontitud los casos de incumplimiento

En concreto, la nueva normativa dará el poder a Bruselas de efectuar controles e inspecciones aleatorios por su parte para verificar el cumplimiento de la legislación, ordenar la retirada de algún modelo si fuese necesario e imponer multas administrativas por infracciones a los fabricantes y a los importadores de hasta 30 000 euros por vehículo no conforme.

Además, el nuevo régimen de inspecciones garantizará que los vehículos mantienen un nivel de emisiones permitido durante toda su vida útil, y los talleres independientes tendrán que tener acceso a toda la información necesaria sobre los vehículos para poder competir en condiciones de igualdad con los fabricantes y contribuir así a que bajen los precios de sus servicios, entre otras medidas.

Y señala la Unión Europea que el correcto funcionamiento de los servicios técnicos es fundamental para garantizar un nivel elevado de seguridad y de protección del medio ambiente y mantener de este modo la confianza de los consumidores en el sistema.

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