Citroën y los inventos españoles más confortables
La marca francesa de los chevrones ha reunido en un museo virtual los 50 inventos españoles que más han facilitado la vida a las personas. El C4 fabricado en Madrid es su inspiración.
Los 50 inventos españoles que más han facilitado la vida a las personas durante los últimos años han sido reunidos por la marca gala Citroën en un museo virtual, con el fin de que la gente los pueda identificar como "Made in Spain (hechos en España)", al igual que el último modelo del fabricante, el Citroën C4, que se fabrica en Madrid para todo el mundo.
El museo, que está disponible en la red social Instagram (@museodelconfort), lleva el nombre de "Museo del confort by Nuevo Citroën C4" y refleja los valores de la marca francesa: creatividad, ingenio y diseño.
Los inventos que están recogidos en el original museo, para el que Citroën ha contado con el asesoramiento del arquitecto especializado en diseño Juli Capella, se agrupan en cuatro salas: confort, diseño, tecnología y electricidad.
Enfoque total al confort
En la del Confort podemos encontrar el chupachups (de Enric Bernat en 1959), la jeringuilla desechable (de Manuel Jalón en 1970, que también fue el creador de la fregona), el abrelatas (de José Valle Armesto, en 1906) o la minipimer (de Gabriel Lluelles, en 1960).
En la sala centrada en el diseño destacan el futbolín (creado en 1937 por Alexandre Campos, alias Alejandro Finisterre), el interruptor Simon (en 1916 por Arturo Simón Vibet), la grapadora (José Enrique Aranzábal y Juan Solozábal en 1930); y la carabela de Enrique el Navegante (S. XV), con la que los exploradores renacentistas consiguieron recorrer el mundo, entre otros.
Tecnología Made in Spain
En la sala de la tecnología española que más ha contribuido a mejorar la vida nos encontramos con el traje de astronauta creado en 1935 por Emilio Herrero, un primer prototipo del atuendo que más tarde perfeccionaron los soviéticos para protegerse en sus primeros paseos orbitales; el submarino de Narciso Monturiol (1859); el autogiro de Juan de la Cierva (1923); y el laringoscopio de Manuel García (1855).
En la cuarta y última sala, con la electricidad como protagonista, figuran inventos ‘Made in Spain’ como el teleférico de 1887 de Leonardo Torres Quevedo y su puntero láser (1930), el popular tren Talgo de Alejandro Goicoechea (1941); y la máquina de rayos portátil del manchego Mónico Sánchez (1909).
Además, el "Museo del Confort by Nuevo Citroën C4" tiene previsto celebrar actividades programadas como visitas guiadas y charlas sobre tendencias en el diseño; así como un concurso dirigido a jóvenes diseñadores, que deberán crear un producto capaz de hacer la vida más confortable a la gente.