Crece el descontento entre los británicos por las trabas para conducir

Los residentes británicos en España, un censo de más de 250 mil personas, llevan desde mayo de este año sufriendo una problemática ciertamente incomoda y limitante para su vida diaria, pues desde esa fecha la moratoria que les permitía conducir con el carnet inglés por nuestras carreteras llegó a su fin y si querían seguir haciéndolo debían examinarse de nuevo aquí.

Las autoridades británicas se encuentran actualmente negociando con la Administración española para que, en contexto de los cambios introducidos por el Brexit, los permisos de conducir británicos puedan volver a ser intercambiables por carnets españoles sin requerir la realización de una prueba práctica.

“Nuestro objetivo es lograr un acuerdo que permita a los titulares de licencias del Reino Unido residentes en España cambiar su permiso por uno español sin necesidad de una prueba práctica, para que puedan volver a las carreteras lo antes posible”, recoge un comunicado del ministro Karl McCartney, subsecretario de Estado Parlamentario del Departamento de Transportes.

Según McCartney, el Gobierno británico, mediante la embajada y la Oficina de Asuntos Exteriores, Commonwealth y Desarrollo, se ha involucrado en las negociaciones, al esgrimir que los conductores españoles no han percibido ningún inconveniente en Reino Unido tras el Brexit, a diferencia de lo que sí ha ocurrido con los ingleses en España.

El Gobierno británico ya ha llegado a acuerdos con otros 24 Estados miembros de la UE, sin embargo, el proceso se está demorando en España. Según el ministro McCartney, el Gobierno español ha exigido elementos adicionales que ningún otro país ha pedido en relación a esta cuestión.

“Entendemos que algunos ciudadanos del Reino Unido actualmente no pueden conducir mientras estamos negociando con los españoles. A los afectados, les reiteramos que entendemos su frustración, y somos conscientes del severo impacto en su vida cotidiana”, ha expresado el ministro, asegurando que están haciendo todo lo posible para solucionar el problema.

Esdiario se ha puesto en contacto con algunos afectados que nos cuentan que como el gobierno español no ha dado ninguna explicación, solamente pueden especular - ¿es una muestra de su frustración con los británicos por la falta de avances en las negociaciones? ¿una reacción contra las actitudes eurófobas expresadas por los políticos? ¿una medida de presión con Gibraltar de trasfondo? Sea lo que sea, han cogido de rehenes a miles de ciudadanos británicos residentes en España, dejándoles sin poder conducir, muchos de ellos jubilados, que viven lejos de comercios, que tienen citas hospitalarias o gente a su cuidado y se están viendo aislados durante los últimos cinco meses.

Tomar como rehenes a ciudadanos extranjeros es un acto del más absoluto cinismo, pero en este caso ni siquiera se ha calculado con precisión, ya que estos rehenes no importan nada al otro gobierno. Pero, además de los británicos, hay otros afectados por este juego diplomático: todos aquellos españoles que sacaron el carnet de conducir (es más sencillo y mucho más económico que en España) mientras eran residentes en el Reino Unido.

No obstante, en la última semana de julio fue mantenida una fructífera reunión que acerca el final de la negociación. Si bien queda trabajo pendiente para acordar los anexos del acuerdo entre ambos países, las autoridades del Reino Unido explican que una vez que se finalice el acuerdo, el mismo se publicará en el BOE.

A partir de ese día, los ciudadanos británicos residentes en España tendrán un plazo de seis meses para canjear su permiso de conducir británico por uno expedido por las autoridades de España sin necesidad de realizar ninguna prueba. Aquellos cuyo permiso de conducción haya caducado recientemente también podrán intercambiarlo por uno español.