Japón vive un Mobility Show marcado por el avance del coche eléctrico chino
El Japan Mobility Show en Tokio busca revitalizar la industria automotriz japonesa, pero enfrenta obstáculos a medida que China avanza en el mercado de vehículos eléctricos con la marca BYD
Con una armada de empresas emergentes, vehículos eléctricos, robots y conciertos, el Japan Mobility Show busca celebrar en Tokio a la industria automotriz japonesa, pero las señales de decadencia del sector en el país se multiplican, sobre todo frente a China.
El "Japan Mobility Show" (Salón de la Movilidad de Japón), que se celebra en Tokio del sábado hasta el 5 de noviembre, pretende estar más en consonancia con su época que su predecesor, el Salón del Automóvil de Tokio, cuya última edición se celebró en 2019.
Pero el sector automovilístico mundial ha vivido en los últimos años profundos cambios que han tomado por sorpresa a los fabricantes japoneses. El segmento de los vehículos eléctricos despegó en China, Europa y Estados Unidos. La industria automotriz japonesa, comenzando con Toyota, pensaba estar a salvo durante un buen tiempo gracias a su tecnología híbrida, pero no fue así.
Su caída es particularmente fuerte en el mercado chino, donde sus ventas se desplomaron 19% en volumen en los nueve primeros meses de 2023, mientras que las de las marcas chinas crecieron 20% en el mismo período, según el sitio especializado Marklines. Para Mitsubishi Motors, la hecatombe en China es tal que el martes anunció que renuncia a su producción local.
Se debe relativizar la importancia de ese título ya que las marcas japonesas producen el doble de vehículos en sus fábricas en el extranjero (17 millones de unidades en 2022) que en el archipiélago.
La cuota de mercado de los fabricantes japoneses en China "seguirá disminuyendo", predice Koji Endo, analista de SBI Securities. "No son actores importantes en el sector eléctrico" y probablemente les será imposible alcanzar a los competidores locales en ese ámbito, que cuentan con un apoyo importante de las autoridades chinas, añade.
Gracias a su avance en los vehículos eléctricos se prevé que China destrone este año a Japón como primer exportador de automóviles del mundo. No obstante, se debe relativizar la importancia de ese título ya que las marcas japonesas producen el doble de vehículos en sus fábricas en el extranjero (17 millones de unidades en 2022) que en el archipiélago.
El entorno del mercado es difícil actualmente y no podemos prolongar el pasado
"Para mantener nuestra fuerte competitividad debemos abandonar el marco convencional del automóvil y transformarnos en una industria de la movilidad", con "colaboraciones en todos los frentes" y esto "rápidamente", afirmó recientemente Koji Sato, director general de Toyota.
"El entorno del mercado es difícil actualmente y no podemos prolongar el pasado", estimó Makoto Uchida, director general de Nissan, durante una reciente conferencia de prensa en línea de Jama, la asociación de fabricantes de automóviles japoneses que organiza el Japan Mobility Show.
BYD y Godzilla
El número de empresas que participan en el salón ha aumentado respecto a 2019 (475, un récord), mientras que el de expositores extranjeros quedó en 19, de los cuales sólo tres son fabricantes de automóviles.
No obstante, uno de estos últimos será sin duda una de las principales atracciones del salón: BYD, el campeón chino de vehículos eléctricos y gran rival del estadounidense Tesla a nivel mundial.
BYD se convirtió a principios de 2023 en el primer fabricante de automóviles chino en lanzarse en Japón. Sin embargo, sus inicios en este mercado son muy modestos (menos de 900 unidades vendidas desde enero hasta finales de septiembre), porque las marcas japonesas son ultradominantes en el archipiélago.
Eclipsado por el despegue mundial de los autos eléctricos, el hidrógeno estará presente en el salón, pero sobre todo para suministrar electricidad a los conciertos y espectáculos. Una forma de mantener las apariencias para los fabricantes de automóviles japoneses como Toyota, que durante mucho tiempo prefirieron apostar por esta fuente de energía.
Una zona del salón está dedicada a las tecnologías para la gestión de catástrofes naturales, en un entorno de ruinas diseñado en colaboración con la película japonesa "Godzilla Minus One", que se estrenará el 3 de noviembre en el archipiélago.
¿Deberíamos considerar ahora también la interminable lucha del Japón contra este famoso monstruo como una alegoría de las graves amenazas que pesan sobre su industria automovilística, que debe cerrar filas ante la adversidad?
Tanto las grandes empresas como las nuevas empresas se enfrentan al mismo sentimiento de crisis
Se ha instalado una "percepción común" de una decadencia de la industria japonesa "y tanto las grandes empresas como las nuevas empresas se enfrentan al mismo sentimiento de crisis", admitió recientemente Jun Nagata, presidente del comité de organización del Japan Mobility Show.
Pero la movilidad es un "motor" para el crecimiento futuro de Japón y un tema unificador, afirmó.