Citroën demuestra con el ë-C4X la importancia de la silueta en los eléctricos
La marca del doble chevron se ha impuesto en una prueba oficial para ver qué eléctrico era el más rápido recorriendo 1.000km. Su aerodinámica carrocería le ha dado la ventaja definitiva.
Todos sabemos que la autonomía es el gran caballo de batalla de la imparable legión de coches eléctricos que cada mes llegan a los escaparates de los concesionarios en busca de un comprador, una realidad que nos aboca a un futuro de movilidad cero emisiones en el que tendremos que modificar nuestras costumbres de viaje, ya que realizar 1.000km con un eléctrico, mientras la red de recarga no se establezca adecuadamente, necesitará de un proceso de planificación y adaptación.
Conscientes de ello, y para arrojar luz sobre la autonomía y la eficacia de su oferta eléctrica, Citroën encargó a UTAC, un grupo independiente de renombre mundial, que evaluara la posición del ë-C4 X dentro de su panorama competitivo y respondiera a la pregunta: "¿Qué modelo eléctrico tarda menos en recorrer 1.000 km?".
En respuesta a esta cuestión práctica que todo cliente de un vehículo eléctrico se plantea, y que afecta a su capacidad para emprender viajes largos, el ë-C4 X con su versión de 420 km de autonomía demostró ser el más rápido en recorrer esta distancia. Se comparó con vehículos 100% eléctricos de otras Marcas.
Este resultado pone de manifiesto las diferentes decisiones tomadas para el ë-C4 X, que se basa en una batería compacta, más ligera y menos costosa, una capacidad de carga rápida de 100 kW con una curva de carga eficiente, un motor eléctrico eficiente y optimizaciones aerodinámicas apropiadas. Estas elecciones se alinean con las realizadas para el ë-C4, compartiendo la misma filosofía.
Combinados con la nueva aplicación e-ROUTES, un verdadero asistente personal conectado que permite la gestión de rutas en tiempo real, ë-C4 y ë-C4 X demuestran estar perfectamente adaptados a la vida diaria y son capaces de emprender largos viajes con toda tranquilidad.
El Citroën ë-C4 X fue el más rápido en completar los 1.000 km, con un tiempo total, recarga incluida, de 11 horas y 57 minutos. Los competidores tardaron entre 14 y 67 minutos más en recorrer la misma distancia. Los resultados, tal y como indican las mediciones de UTAC, se explican por un menor consumo de energía y unos tiempos de recarga optimizados, lo que confirma las soluciones técnicas elegidas para el ë-C4 X y, por extensión, para el ë-C4.
Las mediciones realizadas por los expertos de UTAC ponen de manifiesto que el ë-C4 X requiere paradas de carga más cortas y presenta un menor consumo de energía en comparación con otros modelos, y en esos resultados que permiten afrontar viajes largos con serenidad ha tenido mucho que ver su silueta de berlina tradicional, la más eficiente aerodinámicamente, un factor responsable de hasta el 30% del consumo a velocidades de crucero en autovía.
En lugar de llevar constantemente una batería pesada y costosa, es más ventajoso disponer de una batería optimizada que se cargue rápidamente. Sorprendentemente, es más eficaz hacer paradas regulares y breves que cubrir largas distancias con paradas mucho más largas. Esto se explica por la curva de carga, que disminuye a medida que aumenta el nivel de la batería. La carga es más rápida al principio que al final de la recarga: se tarda más en cargar la batería del 80% al 100% que del 0% al 80%. Por lo tanto, para un viaje largo, es más eficiente hacer varias paradas de carga cortas para beneficiarse de la mayor potencia de carga y reducir el coste de carga.