Se confirman los presagios: los militares estaban en la cabina
Las dificultades a la hora de rescatar los restos del helicóptero siniestrado alimentaron especulaciones entre los familiares que finalmente no tenían nada que ver con lo que pasó en el mar.
Se acabaron las especulaciones en torno a la hasta ahora extraña desaparición de los tres militares españoles tras el siniestro de su helicóptero en aguas del Atlántico. No habían sido secuestrados, como sospecharon sus familiares en un primer momento. Sus cuerpos fueron finalmente localizados este jueves por los equipos de rescate dentro de la cabina del aparato accidentado.
El ministro de Defensa, Pedro Morenés, adelantó la información en una rueda de prensa en la Base Aérea de Gandó, una declaración en la que no ha admitido preguntas. En ella, explicó que el juez militar comunicó al ministro este extremo a las 19.07 horas (hora canaria) aún a bordo del buque ´Rayo´ y que acto seguido se comunicó a las familias la noticia. "Recuperar los cuerpos y subirlos al ´Rayo´ con todas las garantías de seguridad y el buen fin de la operación" es el "principal objetivo", remarcó el ministro, que explicó que "considerando las malísimas condiciones meteorológicas en la zona" estas labores se pueden alargar.
Así, dijo que una vez sea izado el helicóptero los cuerpos de los fallecidos "serán trasladados a Las Palmas de Gran Canaria para continuar con los tramites judiciales establecidos". Morenés explicó que con este desgraciado hallazgo el juez "ha levantado el secreto de las actuaciones". También precisó que seguirá "informando de aquellas actuaciones que se tengan que realizar". La "prioridad número uno", dada las malas condiciones de la mar, es la "seguridad" de las personas que participan en las labores de rescate, insistió antes de agradecer su trabajo a la Armada y al Ejército del Aire y el apoyo de las patrulleras marroquíes.
El ministro se encuentra en Canarias desde el pasado viernes para conocer ´in situ´ el desarrollo de las labores de búsqueda y en parmanente contacto con los familiares de los tres militares.
Los militares que viajaban en el helicóptero son el capitán José Morales (de Barcelona, casado y con un hijo), el teniente Saúl López Quesada de (Madrid y soltero) y el sargento Jhonander Ojeda (de Telde, soltero).
El AS 332 Super Puma del 802 escuadrón, con base en Gando, en la isla de Gran Canaria, quedó semihundido en el Atlántico cuando regresaba a la base canaria desde la localidad mauritana de Nouadibou. El helicóptero accidentado había salido de Dakar, en Senegal, y tras repostar en Nuadibú se dirigía hacia las islas Canarias cuando cayó al mar a unas 40 millas (unos 74 kilómetros) al suroeste de Dajla.