Aguirre arrincona a Carmena con la lista "negra" de su concejala
La líder de los populares en el Ayuntamiento de Madrid no ha dejado títere con cabeza sobre la política cultural de la alcaldesa hasta el punto de haber apostado que habrá cese o dimisión.
Aguirre ha puesto de relieve el caos del Consistorio de Carmena
Celia Mayer tiene que dimitir. Esa ha sido la reclamación realizada por Esperanza Aguirre en una rueda de prensa tras la reunión del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Madrid en la que la líder de la oposición ha repasado los últimos acontecimientos vinculados al área de Cultura del Consistorio.
El dedo acusador de Aguirre se ha dirigido en primer lugar a la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, por su "desaparición" con el asunto de los titiriteros y por haber tardado tres días en dar una rueda de prensa para explicarlo.
Un "bodrio" con dinero público
Aguirre, que ha considerado que le parece muy bien la petición de perdón de la alcaldesa, no ha dejado de recordar que a Carmena no le preocupó lo más mínimo calificar a ETA de "movimiento político" y que dicho "bodrio" -en alusión a la obra- ha sido pagado con fondos públicos mientras que ha cerrado un teatro dejando en la calle a ochenta personas.
Por todo eso, y en alusión a los patinazos de Mayer con la memoria histórica y los titiriteros anarquistas, recordó una frase de Juan Carlos Monedero en la que señalaba que en política el perdón se conjuga con la dimisión.
Tampoco el PSOE ha escapado a los dardos de Aguirre, aludiendo al papel de los socialistas en el mantenimiento del equipo de gobierno de Ahora Madrid. Por su responsabilidad en la cuestión, la del PP ha pedido al Pleno y a la alcaldesa la destitución de la delegada de Cultura esperando que el PSOE y Ciudadanos secunden la propuesta con sus votos.
Cinco euros por Mayer
Según Aguirre, es tan probable que Carmena cese a Mayer que se ha apostado cinco euros a que no llegará al pleno del próximo jueves para no tener que dar explicaciones sobre el descontrol aplicado en la eliminación de símbolos por la Ley de Memoria Histórica.
Las acusaciones de Aguirre han ido dirigidas también hacia la preocupación por unas cuestiones que no preocupan a la ciudadanía mientras que "los inversores huyen de Madrid" en alusión a la salida del Grupo Wanda por el impasse del Edificio España.